Europa no se compromete a retirar la posición común

El ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, tenía un brillo especial en los ojos durante la reunión de sus homólogos europeos en Luxemburgo el pasado mes, cuando consiguió que los Veintisiete le dieran tres meses más para continuar intentando arrancar de Cuba el gesto suficiente que justificara el cambio de la posición común.«Esto va a ser importante», dijo dirigiéndose confiado a un grupo de periodistas. La promesa de la liberación de los 52 prisioneros políticos en los próximos meses anunciada el miércoles por Cuba es el as que tenía en la manga para mostrar esa confianza a prueba de bombas, una promesa que comentó a sus colegas europeos y que, seguramente, ya deslizó el canciller cubano Bruno Rodríguez días antes a Moratinos cuando se reunieron en París.Queda por ver si el movimiento del régimen castrista será suficiente para convencer a Alemania, República Checa o Polonia, Estados miembros de la UE reacios a la eliminación de la posición común, que condiciona las relaciones con la isla a los avances en la situación de los derechos humanos y de la democracia. Ayer, la jefa de la diplomacia europea, la Alta Representante Catherine Ashton, dio felicitó la liberación y aseguró que la «UE apoya activamente el proceso de negociación» con Cuba. Un portavoz comunitario, en nombre de Ashton, no quiso dar más pistas sobre si la liberación de presos será suficiente para eliminar la posición común, y recordó que esta decisión está en manos de los Estados miembros que lo tienen que decidir por unanimidad. No obstante, la británica llevó su apoyo a Moratinos hasta el extremo que siempre mantienen sus declaraciones conservadoras, atadas siempre a la posturade los Veintisiete, aunque el Gobierno francés ya ha calificado el anuncio de «gesto muy significativo» por parte de las autoridades cubanas. Las felicitaciones llegaron también del otro lado del charco. En EE UU, la secretaria de Estado Hilary Clinton aplaudió el gesto posivo, aunque considera que éste llega tarde.Moratinos ha invertido gran parte de su atención, y también capital político, en el cambio de esta posición común que impuso Aznar a la UE en 1996, un tema tan sensible que fue el único que no incluyeron en el acuerdo de objetivos con el PP para la presidencia española de la UE.Rolando Jiménez, el excluidoRolando Jiménez Pozada fue el último de los 75 disidentes encarcelados en la terrible «Primavera Negra» de 2003. Detenido el 25 de abril, un mes después que el resto de activistas, forma parte de la lista de 53 presos de conciencia que permanecen en la cárcel desde aquella terrible purga, según Amnistía Internacional. Pese a todo, no figura entre los 52 encarcelados que el régimen se ha comprometido a liberar. Es el excluido. La fiscal solicitó para él seis años, pero la Sala de Delitos de la Seguridad del Estado le impuso el doble de condena por los supuestos delitos de desacato y revelación de secretos ya que era oficial del Estado. Ha hecho huelgas de hambre para exigir la libertad condicional que debía disfrutar desde hace un año.