Cádiz

Los amoríos del duque de Cádiz en televisión por Jesús Mariñas

El príncipe Kardam, con su esposa Miriam Ungría
El príncipe Kardam, con su esposa Miriam Ungríalarazon

Bruno Delaye, embajador de Francia y acérrimo entusiasta de los toros, sigue ofreciendo su céntrica residencia como ninguna otra delegación. Una puerta siempre abierta donde te reciben tres imponentes Meninas de Manolo Valdés. Carlos Mundy presentaba su primera novela que no tiene como protagonista a Eva Sannum como podría temers. A fin de cuentas, en su piso, vecino al museo del Prado, habitó la joven durante su estancia en la capital mientras encandilaba al, por entonces soltero, Príncipe Felipe. Mundy convierte a su padre en una especie de James Bond de los cuarenta, como subrayó la duquesa de Fernandina que ha rematado un libreto para ópera moderna. Así, continúa su carrera como autora adormeciada, después de publicar «Nápoles 23», tal vez por la herencia de 17 millones de euros que recibió tras morir su padre, el señor de Gregorio.Miriam Ungría, la princesa heredera de Bulgaria, comentó que la recuperación de su marido, el príncipe Kardam, va muy bien: «Estamos llenos de optimismo», después del aparatoso y casi mortal accidente que sufrió hace casi un año: «Va bien, muy bien, estamos llenos de optimismo».La obra que presentó está llena de referencias históricas, exhuma cómo en el comienzo de los cuarenta se creó una conspiración para matar a Franco: «Le pretendían los nazis y, también los aliados para facilitar la entrada de España en la Segunda Guerra Mundial. Pensaban reemplazarle con Muñoz Grandes», narra el libro y habrá que creerle, aunque detecté un despiste que le comenté a su autor. Asegura que Miguel Primo de Rivera, «era hijo del fundador de Falange», cuando José Antonio no tuvo descendencia. «Serán cosas de la traducción española, conozco muy bien quién fue Miguel», comentaba cerca de la exótica Mirta Miller, a la que flanqueaba Cristina Barrios, embajadora en Haití: «La reconstrucción va poco a poco», confirmó mientras Miller anunciaba el rodaje de una «tele movie» sobre sus ocho años de relación con el duque de Cádiz. Ella fue su gran amor aunque se volvió a casar con Emmanuella Pratolongo: «No me gusta lo que contaron de mí, la relación no fue tan secreta porque coincidí mucho con Luis Alfonso. Confío en no tener que demandar a nadie», concluyó.