Al Shabaab llama al boicot

En medio de los problemas internos de Kenia, que contiene el aliento para que no se repita la oleada de violencia postelectoral, desde la frontera con Somalia se lanzaron mensajes para intentar desestabilizar al país. Los militantes de Al Shabaab, el grupo somalí ligado a Al Qaeda, urgieron a los musulmanes de Kenia a boicotear las elecciones y a que se unieran a la yihad contra los militares kenianos, que desplegaron sus tropas en Somalia en 2011 para intentar contener a los radicales. La población musulmana en Kenia es representa alrededor del 11% y Al Shabaab les recordó que son tratados por el Gobierno de Nairobi como extranjeros o ciudadanos de segunda. «Vuestras regiones son las menos desarrolladas y las que menos infraestructuras tienen. Habéis sido engañados por las falsas promesas de los candidatos presidenciales y las mismas promesas vacías se han repetido durante la campaña», indicó Al Shabaab en un comunicado citado por la empresa estadounidense SITE. De hecho ayer, en Garissa, una ciudad principalmente musulmana al este de Kenia, se registró un ataque con granada en un colegio electoral. Aunque no se registraron heridos entre los votantes de Garissa, muy cercano a la frontera con Somalia, el ataque causó momentos de pánico. «Una granada de mano explotó cerca de un centro de votación», explicó el comisario Mohamed Maalim a Reuters. «La explosión se produjo fuera, donde todavía había gente esperando para votar». En Garissa también vive un considerable porcentaje de somalíes. El domingo, sin ir más lejos, se produjo un ataque similar. El jefe de la Policía de Kenia explicó entonces que dos personas murieron por el ataque de una granada y que una bomba explotó en la zona de Mandera, cerca de la frontera, hiriendo a cuatro personas. Desde la misión de la Unión Africana, Al Shabaab ha ido perdiendo territorio e influencia en los últimos 18 meses, pero continúa siendo una gran amenaza para la estabilidad regional.