Las FARC comienzan a entregar las armas

Comenzó la cuenta atrás. Amnistías y asientos en el Senado a cambio de armas. El desarme de las FARC, que debe concluir integralmente a finales de mayo, arrancó ayer con la entrega, a la Misión de Naciones Unidas en Colombia, de las armas de los guerrilleros que forman parte del Mecanismo de Monitoreo y Verificación del Cese del Fuego. Fueron 322 militantes de esa guerrilla los que se despidieron de sus AK47. En los próximos días seguirán entregando fusiles hasta llegar al 30% pautado en la primera fase del proceso.

Además de recibir las armas de los guerrilleros que forman parte del Mecanismo de Monitoreo del Cese del Fuego, la misión de la ONU comenzó ayer con la identificación y el registro del armamento que tiene la guerrilla en las 26 zonas «veredales» –fincas en la montaña– donde se encuentran concentrados para posteriormente desmovilizarse. Según el cronograma del desarme, en una segunda fase las FARC entregarán otro 30% de las armas, y en la tercera y última, el 40% restante, para que durante el mes de mayo la Misión de la ONU retire de las zonas los contenedores en los que irán siendo depositadas gradualmente, hasta fundirse y convertirse en estatuas. El 1 de junio, día D, los 7.000 guerrilleros se convertirán en civiles y comenzará el proceso para convertirse en partido político. En este sentido, la implementación del punto de participación política, acordado en La Habana, estaría próximo a «culminar» en el Congreso.

El Alto Comisionado para la Paz, Sergio Jaramillo, se refirió también a la amnistía de los cerca de 5.000 guerrilleros presos, al asegurar que para que este proceso avance es importante la seguridad jurídica, física y, de alguna manera, socio-económica de las FARC. «En este momento estamos hablando de garantizar la seguridad jurídica de las FARC, y esta semana 1.200 de ellos tendrán una resolución firmada por el Alto Comisionado, lo que le permitiría a los jueces actuar», dijo. 1200 millones de euros serán aportados para facilitar esta transición.

El presidente Juan Manuel Santos calificó el desarme como el fin de un gran obstáculo para el progreso del país: «Muchos no han visto, o no quieren ver, la trascendencia de haber acabado un conflicto de más de medio siglo, haber detenido esa fábrica de víctimas que es la guerra, o de que vivamos los días más pacíficos en cuarenta años, hoy las FARC están iniciando el desarme», manifestó Santos.