Internacional
Marruecos apuesta por el tanque K2 Black Panther y deja atrás al modelo español
El país magrebí refuerza su modernización militar con uno de los carros de combate más avanzados del mundo, marcando un precedente en África y ganando ventaja tecnológica en comparación con modelos europeos
Con un presupuesto de defensa que en 2025 alcanza los 133.000 millones de dirhams (unos 12.300 millones de euros), Marruecos reafirma su objetivo de convertirse en una potencia militar regional. Entre los movimientos estratégicos más destacados se encuentra el interés por adquirir el K2 Black Panther, el tanque de combate principal desarrollado por Corea del Sur, considerado entre los mejores del mundo.
Esta incorporación marcaría un antes y un después en las capacidades del Ejército marroquí, especialmente si se compara con modelos como el Leopard 2E español, cuya evolución tecnológica ha sido más conservadora.
El tanque surcoreano que revoluciona los campos de batalla
El K2 Black Panther, diseñado por Hyundai Rotem, representa la cuarta generación de carros de combate. Su objetivo es dominar entornos de guerra moderna combinando potencia, movilidad y protección avanzada.
Entre sus características más impresionantes destacan:
Cañón de 120 mm (55 calibres) con capacidad para disparar proyectiles inteligentes como el KSTAM, que impactan desde arriba, donde los blindajes suelen ser más débiles.
Sistema de control de fuego de alta precisión, con telémetro láser, sensores térmicos, cámaras HD y un ordenador que predice el movimiento de objetivos móviles.
Suspensión hidroneumática ajustable, que permite al tanque adaptarse al terreno, inclinarse para disparar con mayor precisión o superar obstáculos con agilidad.
Motor diésel de 1.500 CV, que lo impulsa hasta 70 km/h en carretera y 50 km/h en terrenos complicados.
Sistemas de protección activa, que detectan misiles y lanzan contramedidas defensivas antes del impacto.
Comunicación táctica avanzada, permitiendo la coordinación en tiempo real entre unidades y con el mando central.
Un paso adelante frente al Leopard 2E
En comparación, el Leopard 2E, carro de combate principal del Ejército español, aunque fiable y potente, no incorpora aún muchas de las tecnologías de defensa activa ni capacidades digitales del K2. Su diseño es una evolución del Leopard 2A6 alemán, centrado más en robustez y potencia de fuego que en versatilidad tecnológica.
Este movimiento de Marruecos hacia un modelo más moderno no solo fortalece su posición frente a países vecinos, sino que también marca una tendencia emergente en África: la búsqueda de equipamiento militar de última generación procedente de Asia.
Un acuerdo que podría influir en todo el continente
La adquisición del K2 por parte de Marruecos podría abrir la puerta a otros países africanos interesados en modernizar sus fuerzas armadas. Corea del Sur, que ya ha exportado este modelo a naciones como Polonia, busca ahora consolidar su presencia en nuevos mercados, y África representa una oportunidad estratégica.
Para Marruecos, se trata también de una jugada geopolítica: alinear parte de su defensa con Corea del Sur y alejarse de su histórica dependencia europea en materia de armamento.
Con este paso, Marruecos no solo eleva su capacidad militar, sino que proyecta un mensaje claro: está dispuesto a competir en el escenario regional con tecnología de vanguardia, adelantándose a sus vecinos y posicionándose como referente militar en el norte de África.