Mismas recetas, más miseria

–¿Cómo ha reaccionado la oposición al plan de Maduro?

–La oposición se ha mantenido muy firme, pero mientras que tratan de tender puentes para el diálogo, el presidente se muestra intransigente. Otro problema es que, aunque la oposición tenga la mayoría absoluta cualificada, el control del poder Legislativo, cualquier ley o medida para controlar al Ejecutivo, debe ser puesta en práctica por una autoridad. Sin embargo, ¿qué autoridad puede poner en práctica una ley aprobada por el Legislativo? La situación política está algo estancada en estos momentos, lo que podría incluso originar un estallido social.

–¿Cómo de grave es la situación económica del país y qué va a hacer el Gobierno?

–En cuanto a la emergencia económica, lo que pretende Maduro es apagar un incendio con gasolina. La situación de escasez que vive ahora Venezuela podría llevar incluso a una hambruna. Hemos llegado hasta aquí debido a los excesivos controles, a lo muy golpeado que está el aparato productivo y a la enorme dependencia de las importaciones. Está claro que en un contexto en el que el precio de barril de petróleo está por debajo de 30 dólares y Venezuela está con las deudas al cuello, mientras que el Gobierno sigue golpeando el proceso productivo, 2016 va a ir en la misma senda que años anteriores. La estrategia chavista sigue siendo cubrir la brecha fiscal imprimiendo dinero y hay que recordar que, en estos años, Venezuela ha alcanzado cifras de inflación que sobrepasan el 200%.

*Economista y analista político venezolano