Bruselas

Un segundo referéndum en Escocia es ya «inevitable»

La ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon
La ministra principal escocesa, Nicola Sturgeonlarazon

El Brexit está cada vez más cerca de convertirse en una realidad. Pero a medida que se aproxima el día en el que Theresa May activará el artículo 50 del Tratado de Lisboa, lo que también se antoja ya imparable es la celebración en Escocia de un segundo referéndum de independencia.

El Brexit está cada vez más cerca de convertirse en una realidad. Pero a medida que se aproxima el día en el que Theresa May activará el artículo 50 del Tratado de Lisboa, lo que también se antoja ya imparable es la celebración en Escocia de un segundo referéndum de independencia. Según publica Financial Times, el Gobierno cree que es “inevitable” que los nacionalistas saquen de nuevo las urnas. “No creo que estemos en posición de impedir que suceda”, comentó un ministro bajo condición de anonimato. Otra persona no identificada cercana a las discusiones señaló que el pensamiento que invade actualmente la oficina de la primera ministra es el de que “el único debate es el de la fecha [de celebración]”.

Desde hace días, la prensa se viene haciendo eco de la preocupación que existe en Downing Street. La ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon, asegura que aún no se ha tomado en firme ninguna decisión al respecto. Pero en una carta publicada en The Timesseñaló que si finalmente se opta por otra consulta “no será por mala fe”, sino debido a la “pura intransigencia del Gobierno central”.

Así mismo, durante una entrevista con la BBC, cuando la periodista le preguntó sobre la posibilidad de celebrar el plebiscito en otoño de 2018, la líder del Partido Nacionalista Escocés (SNP), dijo que “no descartaba nada”. “Cuando un acuerdo del Reino Unido (en las negociaciones del Brexit) esté más claro, creo que sería de sentido común que Escocia tenga una elección, si ese es el camino que elegimos”, matizó.

En el referéndum de 2014, el no a la independencia se impuso con el 55,3% de los votos. Pero según las últimas encuestas, tras el Brexit, la sociedad está completamente dividida al norte de la frontera: un 50% de los escoceses apoya ahora la escisión y otro 50% prefiere seguir siendo parte del Reino Unido.

Sturgeon estaría por tanto esperando a la conferencia de primavera de su formación el próximo 17 de marzo para realizar el anuncio. Londres podría negarse a autorizar dicho plebiscito, pero según los expertos, esto crearía aún más tensión, por lo que May podría dar su beneplácito con la condición de que la consulta se celebrara después de que el Reino Unido haya abandonado oficialmente la UE, previsiblemente para 2019.

La conferencia del SNP coincide precisamente con las fechas que se barajan para que May inicie las negociaciones de divorcio con Bruselas. La primera ministra británica está a la espera de que el proyecto de ley para activar el artículo 50 del Tratado de Lisboa sea aprobado en Westminster. El próximo lunes, el texto volverá a la Cámara de los Comunes después de que los Lores aprobaran dos enmiendas claves para dar garantías a los comunitarios que viven actualmente en el país y otorgar al Parlamento poder de veto en caso de que el acuerdo final con Bruselas no se considere satisfactorio.

La votación supuso una gran derrota para el Ejecutivo. Pero se da por hecho que la Cámara de los Comunes, donde los tories cuentan con mayoría, eche abajo ambas propuestas. Los Lores podrían insistir en cambiar de nuevo el texto, pero ya han anunciado que no rebatirán más veces la decisión de los diputados, que son al fin y al cabo, los elegidos en las urnas.

Por lo tanto, si Westminster aprueba la legislación el mismo lunes, May podría activar ese mismo día el proceso de salida. Fuentes diplomáticas aseguran que el anuncio se quiere hacer cuanto antes para evitar que coincida con las celebraciones que tendrá lugar el 25 de marzo con el 60 aniversario del Tratado de Roma. A pesar de que la líder tory está invitada, no se espera que asista a un acto que, al fin y al cabo, rememorará la historia de un bloque comunitario del que el Reino Unido ya no formará parte.

Si las negociaciones con la UE se antojan complicadas, en casa el escenario no es tampoco fácil, ya que al frente abierto en Edimburgo, se une además el nuevo panorama norirlandés donde. Animados por el histórico respaldo en los recientes comicios, los republicanos del Sinn Fein quieren recuperar su objetivo para la reunificación con la República de Irlanda.