Brindemos con un gin-tonic

El 19 de octubre es «el día del gin-tonic», una fecha reservada mundialmente para honrar a una bebida que simboliza el glamour. Como en la moda, cada temporada se lanzan nuevas tendencias. La teoría más comentada sobre su origen es que se remonta a 1632 en Perú, cuando la condesa de Chinchón enfermó de Malaria pero consiguió superarlo gracias a la corteza de chinchona. No sería hasta el año 1817 cuando dos científicos franceses descubrieron que el componente curativo de la corteza era la quinina, que se empezó a utilizar en forma de pastillas. Sin embargo, como su sabor era demasiado amargo, los oficiales británicos en la India enfermos de malaria empezaron a disolverlas en agua y le añadieron lima, azúcar y ginebra. Este sería el nacimiento del combinado de moda.

España es el tercer país donde más gin-tonics se consumen a nivel mundial, detrás de Filipinas y Estados Unidos, según el ranking International Wine & Spirit Research (IWSR). Una curiosidad: en las discotecas se ve de color azul por el efecto de la quinina, que además de poder curativo, tiene capacidad de producir fluorescencia, por lo que la luz negra hace que brille en la copa. Uno de los referentes dentro de este sector es la marca World Class y sus ginebras premium Tanqueray Nº TEN. También, por supuesto, la exótica Jinzu.