Centros y familias aplauden “a priori” el cambio en el sistema de escolarización

La patronal CECE cree que amplía la libertad de elección y Confedampa espera a conocer más detalles

A la espera de conocer los «detalles» en próximas reuniones con los agentes de la comunidad educativa anunciadas por la Consejería, la patronal de los centros concertados CECE y la Confederación andaluza de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (Confedampa) ven con buenos ojos la información que ha trascendido sobre las propuestas que baraja la Junta para modificar el sistema usado en el proceso de escolarización en el curso 2020/21. Para el secretario general de CECE-Andalucía, Rafael Caamaño, el sistema actual es «enormémente rígido y hay que flexibilizarlo», por lo que aplaude que al cambiar el sistema de zonas escolares y ampliar los criterios del baremo de puntos para lograr plaza se «avanza en la libertad de elección de las familias». Por su parte, la portavoz de Confedampa, Pepi García, defiende que «si es una mejora para que las familias puedan llevar a sus hijos cerca de donde viven, estupendo» pero alerta de que «no se puede decir que cualquier niño podrá ir donde quiere porque eso es imposible ya que las plazas son limitadas y hay colegios con más demanda».

Según informó el titular de Educación, Javier Imbroda, al Consejo de Gobierno este martes, la Junta estudia reformular la actual división de zonas escolares, primando en el baremo para acceder a una plaza la cercanía del domicilio familiar para evitar, según la consejería, que una familia no pueda llevar a sus hijos a un colegio al lado de su casa porque pertenece ya a la zona escolar contigua. El Gobierno andaluz prevé establecer áreas de influencia en anillos. Las familias que estén en el primer anillo más cerca del centro tendrán más puntos, luego las del siguiente y así sucesivamente, además de tener en cuenta la segunda y tercer a opción marcadas como preferentes en caso de no acceder a una plaza en el primer colegio elegido, aunque su casa esté más lejos si no hay familias que vivan cerca con más puntos. Otros cambios previstos pasan por aumentar los tramos de renta –que es uno de los criterios del baremo– para una mayor progresividad; impulsar la reunificación de hermanos (ya da puntos tener hermanos en el centro pero suele haber problemas cuando una familia con varios hijos se traslada para lograr que todos entren en el mismo); valorar aquellos niños que han estado escolarizados en el Primer Ciclo de Infantil –no obligatorio– el año anterior; y mantener las listas de espera hasta septiembre de forma que si quedan vacantes se ocupen con niños que no lograron plaza en el periodo de escolarización (actualmente, las solicitudes fuera de ese plazo las tramita la Delegación de Educación que adjudica el colegio de la zona escolar correspondiente con plaza o el más cercano). Desde Confedampa, García valora que la cercanía del domicilio prime pero espera a conocer los detalles, ya que el consejero Imbroda y la viceconsejera Marta Escrivá se reunieron con las federaciones de asociaciones de padres el pasado 30 de abril pero sólo expusieron las líneas generales y se comprometieron a reunirse con ellos con más información este mes. Sí advierte de que el mensaje lanzado por el Gobierno andaluz de que el objetivo es que las familias puedan llevar a sus hijos donde quieran es «una forma de hablar y así nos lo reconocieron» porque es «imposible» de garantizar ya que depende de la oferta y demanda de los centros.

Para Confedampa, sí es preciso garantizar la reagrupación de hermanos que actualmente «la ley dice que se contemplará pero no es obligatorio» mientras que la posibilidad de tener en cuenta el domicilio de un familiar como los abuelos en caso de que se encarguen de llevar y recoger al niño «hay que ver cómo se contempla y controla». Lo que sí piden las familias a la consejería es que tenga en cuenta a la comunidad educativa antes de aprobar cualquier texto para poder hacer aportaciones, ya que «el plan de refuerzo estival lo conocimos cuando ya estaba lanzado».

La Confederación española de centros de enseñanza (CECE) se muestra más entusiasta con los cambios anunciados porque a su juicio van en la línea de ampliar la libertad de las familias para elegir dónde estudian sus hijos. Para Caamaño, la cercanía al domicilio debe ser un criterio a tener en cuenta «pero no el único ni tan preponderante que los demás apenas cuenten» porque con ello además «no se incentivan que los centros hagan proyectos pedagógicos atractivos para captar alumnos». Aplaude que se incentive la escolarización temprana dando puntos a los niños escolarizados antes de los 3 años y es partidario de tener en cuenta también criterios, aunque no sean decisivos, como que los padres sean antiguos alumnos.

Respecto a ampliar las listas de espera a septiembre, desde CECE creen que debería incluso extenderse a todo el primer trimestre porque «no tiene sentido que si se quedan plazas vacantes en un centro que una familia pidió no pueda acceder a ellas con el curso empezado siempre que sea un tiempo prudencial».

Con todo, tanto los centros como las familias esperan conocer los detalles concretos de la reforma anunciada por la Junta al decreto de 2011 que actualmente regula la admisión del alumnado en los centro escolares.