Coaching de valor

Eduardo Dávila Miura es un ejemplo de torero que ha sabido reinventarse no sólo como apoderado y comunicador sino que, gracias a su formación, se ha hecho un hueco como conferenciante de alta dirección

El toreo, a las puertas –casi- del 2020, debe reinventarse. Adaptarse a los nuevos tiempos. Ahora que se ponen de moda los festivales organizados para beneficio de las Hermandades de Sevilla (el próximo, el 12 de Octubre, para la Esperanza de Triana y El Baratillo), es de justicia reconocer el sitio de aquellos que antes tuvieron la idea de llevarlo a cabo. Eduardo Dávila Miura, fue quien abanderó, el pasado año, el Festival para la Bolsa de Caridad de la Hermandad de la Macarena, con enorme éxito artístico y de participación. Pero Dávila Miura no sólo forma parte de la Junta de esta hermandad sevillana. Eduardo, además de apoderado, es un gran comunicador. Todas las ferias de abril, nos llega su inconfundible voz por las ondas radiofónicas para narrarnos lo que acontece en el ruedo de la Plaza de toros de Sevilla. Gracias a su formación, se ha hecho un hueco como conferenciante de alta dirección -¿Un torero hablando a los empresarios..? -Sí. Además, con grandes y sorprendentes resultados.

Su conocimiento de ambos mundos, le ha permitido identificar paralelismos entre la vida de un torero y la de un directivo a partir de una situación semejante: ambos deben rendir al máximo, ser altamente eficaces y alcanzar el éxito en condiciones difíciles. En el mundo del toro, aprendió a manejar situaciones muy comprometidas. Este aprendizaje lo comparte y explica en sus conferencias. En numerosas ocasiones, estas ponencias tienen lugar en el entorno natural del toro bravo. Por ganaderías de España, organiza eventos o jornadas donde los participantes realizan un taller de toreo y pasan por las dificultades con las que se enfrenta un toreo. El compañerismo, la responsabilidad, la gestión del miedo... Acercar los valores. Reinventarse. Como en el Festival del pasado 12 de octubre, Dávila Miura le ha dado una vuelta de tuerca al toreo actual con su “coaching de valor”.