Los colegios concertados afectados por el cierre de aulas de la Junta recogen firmas

Una cosa es alcanzar un acuerdo bajo determinadas premisas y otra muy distinta es ver cómo éste afecta a cada uno de los centros educativos. La amenaza de la Junta sobre la enseñanza concertada sigue presente y los primeros datos apuntan al cierre de 23 unidades concretas en seis de las ocho provincias –en Almería y Córdoba no hay informes desfavorables–. Algunos de estos centros ya han reaccionado.

En el caso de la provincia de Sevilla, la intención es retirar una unidad de Infantil, una de 1º de Bachillerato y otra de 2º en el colegio Altair. También se ven afectados el centro Pontífice Pablo VI y Salesianos de Utrera, ambos con la retirada del concierto para una unidad de infantil.

Los padres del centro Altair ya se han movilizado y han iniciado una recogida de firmas en la plataforma change.org. Lamentan que la delegación territorial de educación de la Junta pretenda eliminar «una unidad con 22 alumnos en Infantil 3 años, cuando la media de la zona es 20,81 y la media de los centros públicos en Sevilla y su provincia es 21,8». En su petición no entienden que aún estando la ratio por encima de la media planteen eliminar esa unidad».

En la carta que van a remitir a la administración andaluza recuerdan que «las familias tienen derecho a elegir el centro educativo que quieren para sus hijos». En apenas unas horas, la solicitud ya contaba con más de 1.500 firmas.

El malestar es evidente, aunque ha quedado apaciguado por el principio de acuerdo entre la Junta de Andalucía y la patronal Escuelas Católicas de Andalucía (ECA) del pasado miércoles. Aún así, esta organización, que aglutina a la mayoría de los titulares de los centros educativos concertados de la comunidad andaluza, tenía previsto mantener el calendario de movilizaciones a la espera de ver cómo quedaba el nuevo mapa de conciertos. Esta decisión será revisada el lunes en una junta directiva convocada a tal efecto.

Pese al previsto cierre de unidades, la consejera de Educación, Adelaida de la Calle, insistió ayer en que espera que no haya movilizaciones y reiteró que «los conciertos no bajan», atribuyendo los desajustes al descenso demográfico.

Por su parte, la portavoz de Educación del PP-A, Marifrán Carazo, exigió «explicaciones urgentes» directamente a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, ya que sí se cerrarán unidades, por lo que su Gobierno ha vuelto a «mentir».