Valladolid y sus pueblos se dan la mano para conseguir que Dulciora se quede en la ciudad

El alcalde, Óscar Puente, y el presidente de la Diputación, Jesús Julio Carnero, se manifiestan junto a los trabajadores

Cientos de personas, en su mayoría trabajadores de la fábrica de golosinas Dulciora, se manifestaban en la mañana de ayer en Valladolid para pedir una solución al anunciado cierre de la fábrica, que pasa por su venta a un comprador interesado con el que se reunirán la semana que viene.

El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha desvelado que la Fundación Anclaje, un organismo público que engloba a sindicatos, Junta y representantes de la empresa, se reunirá la semana entrante con un comprador «muy interesado» en adquirir la fábrica y «reconvertirla», explicaba a los medios de comunicación respaldado por los cientos de trabajadores de la fábrica vallisoletana.

Puente, que no ha querido desvelar más detalles de la operación, debido a que una indiscreción puede «dar al traste todas las negociaciones», se ha mostrado más optimista que con el caso de Lactalis, pues, en relación a Dulciora, el dueño de la fábrica Mondeléz ha mostrado una actitud «más abierta» para su venta.

En este sentido, el alcalde ha descartado casi por completo la continuación de la actividad de Dulciora «tal y como estaba siendo hasta ahora», pues «ya han vendido hasta la marca», ha informado Puente, quien también ha reconocido que ya ha mantenido reuniones con los posibles compradores, que se han mostrado «muy abiertos».

El alcalde también ha querido mostrar la importancia de la unión de «todos» para luchar por «el mantenimiento de la actividad empresarial en la ciudad», que es un asunto de «vital importancia». A gritos de «Mondeléz, escucha, Dulciora está en la lucha» o exhibiendo pancartas en las que se podía leer «Mondeléz, 232 razones por las que no cerrar Dulciora» -en alusión a los empleos que destruye con su cierre- o «se busca comprador con futuro», los trabajadores de la fábrica han aclamado por el mantenimiento de la actividad empresarial y de todos los puestos de trabajo.

La portavoz del comité de empresa de Dulciora, Belén Bueno, ha declarado a Efe que ellos seguirán «luchando hasta el final» y que, tras la reunión de hace un mes con la dirección de la fábrica no se volverán a reunir otra vez, pues las posturas están «muy claras».

«Si no nos queréis, vendednos», ha aclamado Bueno, quien también ha agradecido todo el apoyo recibido por la ciudadanía e instituciones como «la Junta, el Ayuntamiento y todos los sindicatos» y ha informado que tienen previsto manifestarse en «15 días» y el «6 de julio», mientras, esperarán las informaciones de la posible venta de la fábrica.

La portavoz de empresa también ha manifestado que todos los trabajadores de Dulciora se sienten muy respaldados por conocer que hay trabajadores de otra fábrica de Valladolid, Lauki, que se encuentran en «la misma situación que nosotros», que es algo que «anima y acompaña» para «luchar todos juntos por nuestros trabajos», ha sentenciado Bueno. En la concentración en Fuente Dorada también ha estado presente el presidente de la Diputación de Valladolid, Jesús Julio Carnero, quien ha defendido la situación de los trabajadores de Dulciora, «existen 232 motivos para mantener esta fábrica abierta en Valladolid», pues el mantenimiento de la actividad es «muy importante no solo para la capital, sino para toda la provincia».

Los trabajadores de Dulciora han repartido golosinas entre los asistentes y han leído un manifiesto conjunto en defensa de su trabajo «nos quieren robar nuestro futuro» con este cierre «injustificado», pero lo que no se esperaban era encontrarse con esta plantilla «unida y luchadora».