El 55% de los barceloneses ignora el tricentenario

El intenso esfuerzo propagandístico de la Generalitat para conmemorar el tricentenario de 1714 –año de la caída de Barcelona en la Guerra de Sucesión– y favorecer el clima soberanista no está resultando mucho efecto. Según los datos reflejados por el barómetro semestral del Ayuntamiento de Barcelona, el 55,9 por ciento de los iudadanos desconoce la celebración. El Born Centre Cultural es el acto más conocido por los ciudadanos en el marco del Tricentenario (46,7 por ciento) y, según la encuesta municipal, un 33,6 por de los barceloneses ya lo han visitado.

El barómetro también refleja la tendencia actual del voto en unas municipales. Aunque el alcalde, Xavier Trias, volvería a ganar las elecciones, lo haría con un 13,7 por ciento de los votos, la cifra más baja desde 2007. ERC sería la segunda fuerza con el 7,5 por ciento de intención de voto, lo que también supondría una caída respecto a los datos de diciembre de 2012 (10,6 por ciento). ICV-EUiA (6,9 por ciento) y PSC (5,1 por ciento) serían la tercera y cuarta fuerza más votadas respectivamente, mientras que el PP obtendría el 1,6 por ciento. Por su parte, Ciutadans acumularía el 1,9 por ciento de los votos, registrando así un crecimiento, pero el mayor incremento lo protagonizaría la CUP, que pasaría de 0,9 por ciento de intención de voto en junio de 2013 al 3,3 por ciento en diciembre.

En lo que se refiere a la percepción ciudadana sobre la progresión de Barcelona, sólo un poco más de la mitad de los encuestados considera que la ciudad no ha empeorado en el último año. Así, el 24,6 por ciento cree que ha mejorado y el 27,9 por ciento que se mantiene igual, mientras que el 44,1 por ciento ve un empeoramiento. Pese a todo, estas cifras reflejan una mejora en la percepción, ya que se ha producido una decrecimiento de 9,2 puntos en las respuestas negativas.

A la cabeza de las principales preocupaciones de los barceloneses respecto a su ciudad figura, un año más, el paro y las condiciones de trabajo, (31,3 por ciento), mientras que a gran distancia se sitúan la inseguridad (8,4 por ciento), y los problemas económicos, (7,8 por ciento), estos dos últimos con un ligero decrecimiento respecto al año anterior.

Ante este panorama, cabe destacar el creciente optimismo de los barceloneses, de los cuales sólo el 18 por ciento considera que la ciudad irá a peor en el futuro, casi un 13 por ciento menos que en diciembre de 2013. Así, cerca del 60 por ciento de los ciudadanos confía en la mejora, una sensación que se traslada al ámbito personal, ya que también aumenta el porcentaje de personas que prevé que su economía familiar mejorará.

En este sentido, los resultados de diciembre de 2013 desvelan un incremento de 12 puntos en el porcentaje de personas con buenas expectativas en el ámbito personal, a la vez que se registra un caída de 18 puntos en cuanto a las respuestas negativas.

El consuelo de CiU

Según el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Joaquim Forn, que presentó el barómetro, «el aumento de la confianza en su ciudad que han demostrado los barceloneses y el aval a la gestión municipal» satisfacen al gobierno municipal, que además se enorgullece por «la gran distancia que existe entre CiU y los demás partidos en la intención de voto». «Casi todos los partidos disminuyen, pero nosotros casi doblamos a la segunda fuerza», se consoló Forn, pese a la evidente debilidad de CiU, que arrastra una fatigosa minoría desde que comenzó este mandato en 2011.