La Diputación Permanente admite las comparecencias de cinco consellers

Dieciocho días después del 27-S, Junts pel sí y la CUP siguen negociando en la más absoluta discreción la investidura del futuro president de la Generalitat. No hay president, no hay gobierno ni tampoco parlamento catalán –Artur Mas tiene tiempo para convocar la sesión constitutiva hasta el próximo día 26–, y a juzgar por las pistas que han mostrado ambos bandos, tardará en cerrarse un acuerdo. «Hemos esperado 300 años, podéis esperar un mes y medio o dos meses más», replicaba anteayer Antonio Baños a un grupo de seguidores de Junts pel sí, que al coincidir frente al Palacio de Justicia de Barcelona, en apoyo a los imputados por el 9-N, le reclamaron que haga el favor de convertir a Mas en president. Pero pese a estar pendiente un nuevo president, un nuevo gobierno y un Parlament renovado, la maquinaria institucional no cesa. La Mesa de la Diputación Permanente del Parlament acordó ayer admitir a trámite las solicitudes de comparecencia de cinco consellers de la Generalitat.

PSC e ICV-EUiA pidieron conjuntamente las comparecencias de los consellers en funciones de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila; de Economía, Andreu Mas-Colell, de Salud, Boi Ruiz, y de Enseñanza, Irene Rigau.

Ruiz debe aclarar si el gobierno catalán pretende dejar entrar los intereses privados en los hospitales públicos de Cataluña y apostar por la privatización progresiva de la sanidad pública. De Mas-Colell quieren que responda por la gestión en la adjudicación del CatSalut y el resultado de la licitación en el concurso del servicio de rehabilitación de la sanidad pública. Mientras que a Rigau le pedirán explicaciones sobre la «insuficiencia de ayudas y becas comedor», así como por los pagos pendientes del Govern a los consejos comarcales.

Por su parte, el PP catalán pidió la comparecencia del titular de Justicia, Germà Gordó. Pese a admitirse a trámite todas las peticiones, no hay garantías de que se celebren las comparecencias porque todavía no se han concretado ni la fecha ni el orden del día y el nuevo Parlament de Cataluña se constituirá como muy tarde el 26 de octubre, esto es dentro de dos semanas. Para fijar una sesión de la Diputación Permanente, la presidenta debe convocar a los representates de los grupos para establecer el orden del día.