La Guardia Urbana interpone dos denuncias cada hora contra el «top manta» en Barcelona

Es de sobras conocido que el fenómeno del «top manta» ha provocado en los últimos años diversos problemas, básicamente en Barcelona, pero también en localidades turísticas del litoral catalán, sobre todo en Tarragona.

El comisionado de Empresa, Empleo y Turismo de Barcelona, Agustí Colom, aseguró que el grupo de playas de la Guardia Urbana interpuso entre junio y agosto 10.239 denuncias vinculadas al «top manta», un 26 por ciento más que en el mismo período del año anterior.

Estas cifras son importantes por varios motivos. El primero, y quizá el más significativo, es que estos datos demuestran que hay 43 denuncias cada día en Barcelona por el «top manta», lo que equivale casi a dos demandas casi cada hora. También cabe resaltar que el problema no se ha solucionado, ni mucho menos, más bien al contrario.

Comisón

Colom ofreció estas cifras en la comisión municipal de Economía y Hacienda, después de que partidos de la oposición acusaran al Gobierno municipal de no combatir la venta ambulante ilegal en el debate de una proposición presentada por el PSC, cuya concejal Montserrat Ballarín dijo que el Consistorio de Ada Colau «no ha estado a la altura». No es el único problema, ni mucho menos. ya son numerosas las asociaciones y entidades de comerciantes que se han quejado al Ayuntamiento sobre la incesante actividad del «top manta».

La proposición, que fue aprobada con los votos a favor de todos los partidos excepto del Gobierno de BComú y la CUP, que votaron en contra, constata el incremento de la actividad del «top manta» desde el inicio del mandato y lamenta que el gobierno municipal «no haya hecho todo lo necesario para abordar este problema». También muestra su apoyo a las iniciativas de los comerciantes y al resto de agentes implicados e insta al Consistorio a mantener una actitud «más activa» para evitar este fenómeno, además de incrementar la colaboración con otras administraciones con competencias en el asunto.

«No se puede decir que no hemos actuado. Es un problema difícil y complejo», defendió Colom, que resaltó que es un fenómeno que se repite cada año, y criticó que grupos de oposición aseguren que ha aumentado la presencia de vendedores de «top manta» sin tener datos.

Colom aceptó un ruego de ERC para plantear implementar una tarificación social de los precios públicos de los servicios que presta el Ayuntamiento ya sea directa o indirectamente, algo que ha asegurado que el gobierno de Colau ya está estudiando. La comisión también aprobó una proposición de ERC que pide dotar de las herramientas necesarias a Barcelona Activa, al Consorci d’Educació de Barcelona y a la Fundació Barcelona Formació Professional para crear la figura de un facilitador entre empresas y centro educativos. También aprobó una proposición del PP para «exigir el resarcimiento inmediato de las transferencias que la Generalitat ha dejado de hacer en servicios básicos» en diversos organismos desde 2011.