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Las barceloneses suspenden las políticas de empleo de Trias

Una encuesta revela que los vecinos están satisfechos con la ciudad

El indicador de apoyo al empleo del Ayuntamiento recibe un 3,80 de nota cuando en 2008 fue del 4,30
El indicador de apoyo al empleo del Ayuntamiento recibe un 3,80 de nota cuando en 2008 fue del 4,30larazon

El Ayuntamiento publicó ayer la encuesta de calidad de la ciudad que arroja un resultado sorprendente: los barceloneses están más satisfechos de vivir en la ciudad pese a la crisis. La mayoría de indicadores se mantienen o suben salvo aquellos relacionados con la economía o la vivienda. En palabras del primer teniente de alcalde, Joaquim Forn, la crisis hace que los barceloneses valoren más y mejor el lugar donde viven.

Este estudio se realiza cada cuatro años y, en su tercera edición, los barceloneses puntúan con un 7,7 su grado de satisfacción de vivir en la ciudad, y con un 7,03 la calidad de vida en Barcelona. La encuesta, realizada a 2.050 personas en su domicilio, está dividida en diversos apartados.

El bloque de economía centra las críticas de los barceloneses. Mientras la oferta formativa aprueba con creces, el acceso a la información de oportunidades laborales (4,9), la ayuda al empleo (3,8) o la facilidad para encontrar trabajo suspenden (3,2). Los ciudadanos también ponen en duda la ayuda de la administración a la creación de empresas, con un 4,4. En un segundo bloque, «habitabilidad», destaca la buena nota que obtienen los diferentes modos de transporte público, algo inferior en el caso del Bicing (6,5), y la dificultad de los desplazamientos en la ciudad con coche (5,8). Pese a que la tendencia general va al alza, los barceloneses son muy críticos con todo lo que atañe a la vivienda. Sin bien los indicadores mejoran, y están conformes con la cantidad de oferta de venta y alquiler, los precios de los inmuebles suspenden.

Aire de la ciudad y ruido

El bloque de entorno urbano, iluminación, señalización, pavimentación o mobiliario urbano, oscila entre el 6 y el 6,9. Las obras en la calle aprueban por primera vez con un 6. Los barceloneses también creen, sin grandes alardes, que la limpieza ha mejorado de forma general. El entorno medioambiental centra las criticas de este bloque sobre todo en cuanto se refiere al aire de la ciudad o el ruido.

La salud y los servicios sanitarios, pese a los recortes, siguen cotizando al alza y la asistencia hospitalaria, la asistencia sanitaria o las urgencias obtienen puntuaciones de entre el 6,3 y el 7. La seguridad, otro de los aspectos tradicionalmente polémicos en la ciudad, aprueba en las valoraciones de los ciudadanos incluso en el apartado «cuando oscurece en el centro de la ciudad». No obstante, la justicia recibe un suspenso con un 4,5 y la presencia policial aprueba con un 5,7.

En cuanto a tipo de ciudad, que engloba aspectos como la localización, el reconocimiento internacional o el urbanismo, la nota media supera el siete. Con una excepción, «el coste de vivir compensado por los beneficios que se obtiene» aprueba justito, con una nota de 5,6.

La lengua habitual es el español

El castellano es la lengua habitual de los ciudadanos de Barcelona. Así se desprende de la encuesta de calidad de la ciudad elaborada por el Ayuntamiento. De las 2.050 entrevistas realizadas, un 58% declaró que el español era su primera lengua, una cifra que contrata con el 38,2% que dijo que era el catalán.