Inseguridad ciudadana
Las fiestas de Gràcia acaban con un gran éxito de público y de civismo
BARCELONA-Las fiestas de Gràcia acabaron ayer. Coincidiendo con su cierre, el presidente de la Fundació de la Festa Major de Gràcia, Ricard Estruch y la concejal Maite Fandos hicieron balance de unas fiestas que empezaron el jueves pasado.
La concejal definió esta edición como una celebración de calidad, en la que participaron barceloneses y turistas. En este sentido, aseguró que subió «muchísimo» la asistencia, sobre todo en las actividades de día, aunque no dió datos por la dificultad de cuantificarlo. Fandos puso énfasis en la accesibilidad y el civismo, destacando las visitas guiadas para discapacitados visuales en las calles Fraternitat y Berga. Como novedad se señaló también el control de acceso del público a las calles donde años atrás se habían producido aglomeraciones.
También afirmó que hubo un incremento de las latas decomisadas, de las intervenciones policiales y de las denuncias por realizar necesidades fisiológicas en la calle. En este sentido, el Ayuntamiento cifró en 20.783 las latas decomisadas, por debajo de las 25.100 del año pasado –un 17 por ciento menos–, de las que más de 13.500 se requisaron en siete almacenes y locales ilegales –por 12.281 el año pasado– y 7.260 en la calle –12.821 el año pasado–. La caída se produjo pese a aumentar las intervenciones policiales hasta las 329, por 307 el año pasado, mientras que las denuncias por realizar necesidades fisiológicas en la calle –fundamentalmente orinar– pasaron de 309 a 343 –un 11 por ciento más–, pese a que este año habían un 12 por ciento más de lavabos, hasta 92.
Por su parte, Estruch confirmó que no hubo incidencias destacables, salvo un herido durante la jornada castellera.
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