Desastre meteorológico

Las tormentas de granizo echan a perder las cosechas del Empordà

Cámpings y campamentos de verano son desalojados como prevención

La cosechas de manzana son las más afectadas de todas junto al maíz, arroz, alfalfa y hortalizas
La cosechas de manzana son las más afectadas de todas junto al maíz, arroz, alfalfa y hortalizaslarazon

BARCELONA- Justo un año después de que un virulento incendio asolara casi 14.000 hectáreas del Alt Empordà, la provincia de Girona ha visto como las inclemencias naturales han vuelto a castigarla. En esta ocasión, una granizada en pleno mes de julio se ha llevado por delante cosechas y ha obligado a veraneantes a resguardarse de las tormentas. Ayer por la tarde, la Generalitat mantenía activa la prealerta del Plan Especial por Inundaciones ante un nuevo episodio de lluvias y granizo.

Los municipios de Torroella de Montgrí, Ullà, Gualta, Pals, Serra de Daró, Fontanilles, Palau-Sator, Albons, La Tallada d'Empordà, Verges y Bellcaire d'Empordà sucumbieron el viernes a una fuerte tormenta de granizo y viento. Y con ellos, sus cosechas. En total, 350 hectáreas de cosecha dulce, sobre todo de manzana, se echaron a perder. También se vieron afectadas las plantaciones de maíz, alfalfa y hortalizas. La consellera de Agricultura calcula que se han estropeado entre 15.000 y 20.000 toneladas de producción agrícola. De hecho, sólo se salvaron las cosechas protegidas con una malla que aguantó las embestidas de las piedras de hielo y el viento. Además, en Pals, prácticamente el 80 por ciento de las 600 hectáreas de arrozales se ha visto gravemente afectado por la tempestad. Agroseguro ya ha empezado a evaluar los daños a petición de la Generalitat.

Por otro lado, varios campings y campamentos de jóvenes tuvieron que ser evacuados para poner a salvo a los veraneantes. Aunque la actividad de los centros fue recuperándose poco a poco, tiendas de campaña y ropa evidenciaban el paso de la tormenta. Así, unas cincuenta personas de los cámpings de Torroella de Montgrí pasaron la noche resguardados en el pabellón deportivo de l'Estartit y la Cruz Roja, los Mossos d'Esquadra, Protección Civil y el Servicio de Emergencias Médicas se ocuparon de que los más pequeños vivieran lo que recordaran como una aventura contra las tormentas de granizo y fuerte viento.

Los daños que sí que están completamente evaluados fueron los causados por el macro incendio que quemó durante nueve días el Alt Empordà cercando hasta 16 municipios. Las pérdidas ascienden a 613.835 euros, aunque los afectados no han recibido aún ni el 40 por ciento de las ayudas y quedan todavía partidas por cobrar.

El zona forestal quemada se va recuperando poco. Zonas totalmente carbonizadas empiezan a teñirse de verde, aseguran los alcaldes de los municipios afectados. Más dificultades para volver a la normalidad están teniendo las 110 personas que vieron como sus casas o propiedades eran arrasadas por el fuego. Asimismo, han sido los propios vecinos, con ayuda de voluntarios, los que han limpiado y saneado los bosques de cada uno de los municipios de los árboles quemados que no iban rebrotar.