Los empleados del metro de Barcelona aceptan un nuevo convenio y avalan cesar la huelga

La plantilla del Metro acepta el convenio tras año y medio de negociaciones y desconvoca la huelga del lunes. El acuerdo revierte las externalizaciones y recortes salariales.

No habrá decimotercera ... huelga de Metro el próximo lunes. Las asambleas de trabajadores votaron ayer a favor de aceptar la propuesta del convenio que puso sobre la mesa la Generalitat, que ha actuado como mediadora en el conflicto entre los empleados y Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), después de que la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, acudiera a su auxilio tras año y medio de negociaciones fallidas. Con este sí de la plantilla del Metro, acaban 500 días de rifirrafe entre trabajadores y empresa por la negociación del nuevo convenio en el que ha habido más 8 decenas de reuniones, huelgas sonadas como las del Mobile Wolrd Congress y un último sprint de tres meses de paros todos los lunes, hasta llegar a doce.

La opción de aceptar la última propuesta de convenio y poner fin a las movilizaciones contó con 480 votos a favor, 302 en contra y 56 abstenciones. Colau estaba contenta. Y compartió su alegría a través de las redes sociales. “¡Celebramos acuerdo con los trabajadores del Metro! Mejoramos condiciones laborales y garantizamos la calidad del servicio. Gana el transporte público. Gana la Ciudad», publicó en Twitter. «Sentimos las molestias que han tenido las huelgas para toda la ciudadanía», añadió.

La pesadilla de Colau

La gestión de este conflicto laboral se había convertido para la alcaldesa y su equipo en un quebradero de cabeza. El viernes pasado, sin ir más lejos, la oposición en bloque pidió el cese de la presidenta de TMB, Mercedes Vidal. Colau se resistió. Dos días antes había cambiado la mesa negociadora. Puso a dos personas de su confianza, el ex socialista y gerente del Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Martí, y el coordinador de servicios metropolitanos del Área Metropolitana de Barcelona, Eduard Saurina, con la esperanza de que pudieran desencallar el conflicto. Y así ha sido. Una semana más tarde, ambas partes han llegado a un acuerdo.

La propuesta que ha facilitado el pacto pasa por revertir los servicios externalizados una vez acaben los contratos para tareas de mantenimiento de vías y catenarias. Esto permitirá recuperar 46 empleos. Se mantienen las jubilaciones parciales, se estrenan reducciones de jornada para los trabajadores con hijos o familiares dependientes y se crean dos turnos nuevos que se suman a los de mañana, tarde y noche, para que la empresa no los tenga que cubrir con contratos parciales. Además, se da la posibilidad a los trabajadores con contratos a tiempo parcial a acceder a contratos a tiempo completo.

TMB confía en que el aval de la plantilla al acuerdo asegura la estabilidad laboral y organizativa, al menos, hasta el 31 de diciembre de 2019, cuando caduca este nuevo convenio. A través de un comunicado, la empresa quiso reconocer «el esfuerzo y la voluntad de todas las partes para llegar a un acuerdo, así como el papel desarrollados durante el proceso de mediación por el departamento de Trabajo de la Generalitat».

Desde la oposición, el presidente del grupo municipal del PP, Alberto Fernández, lamentó que «el acuerdo llega tres meses después» y «demuestra la mala gestión del conflicto por parte del gobierno de Ada Colau».