Comunitat Valenciana

2018, un año de retos económicos para el Consell

En el último ejercicio antes de las autonómicas, tendrá que cumplir promesas

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, recientemente en la presentación del Plan de Actuación de Núcleos de Cercanías
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, recientemente en la presentación del Plan de Actuación de Núcleos de Cercaníaslarazon

El año que está a punto de empezar no será fácil para el Consell, en especial para su presidente, Ximo Puig. En el último ejercicio completo de su legislatura antes de las elecciones autonómicas de 2019, deberá cumplir con algunas de sus promesas y cerrar propuestas que siguen pendientes tras dos años y medio de Gobierno. Las críticas de la oposición son habituales y se dan por sentadas, pero más grave fue el varapalo que recibió el pasado jueves el jefe del Consell de mano de uno de los principales empresarios del país, y presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), Vicente Boluda.

Un toque de atención en el que se le acusó de no «haber hecho nada» en sus dos años y medio de gobierno y de carecer de política industrial.

Lo cierto es que, a falta de un año y medio para que acabe la legislatura, siguen sin cumplirse la mayoría de proyectos prometidos por el Consell. Uno de los más antiguos, la Agencia Valenciana de la Innovación, de las primeras promesas que hizo Puig y de la que hasta ahora poco se conoce, más allá del nombre de su director, Antonio García-Reche, y que su sede se ubicará en Alicante.

Una provincia en la que, por cierto, queda otro gran asunto por resolver. La Ciudad de la Luz. Aunque Puig prometió crear en los antiguos estudios cinematográficos «el gran espacio de digitalización y de inteligencia artificial de la economía valenciana», la realidad es que, por orden de la Unión Europea, la Generalitat valenciana no puede hacer prácticamente nada en dichas instalaciones,

Bruselas ha prohibido hasta 2027 sacar ningún tipo de rentabilidad económica del recinto, más allá de venderlo o alquilarlo. La misma situación que cuando Puig llegó al Consell.

Parc Sagunt II es otra de las demandas empresariales. Si bien es cierto que el actual Gobierno ha logrado vender parcelas de Parc Sagunt I que estuvieron desiertas durante la crisis -a un precio muy bajo- la segunda fase del proyecto sigue sin ponerse en marcha.

Otro de los enfrentamientos que ha tenido el jefe del Consell a lo largo de su mandato con los empresarios vino a cuenta de Puerto Mediterráneo, el centro comercial de Paterna que no se puso en marcha debido a la negativa del departamento de Medio Ambiente de la Conselleria de Agricultura.

Para compensar, Amazon anunció hace unos meses la apertura de uno de sus centros en Paterna. Por el momento, es solo un proyecto.

El Ágora es otra de las ideas del presidente que sí ha logrado convertir en realidad. El jefe del Consell prometió desde su llegada que encontraría una utilidad rentable para el edificio, y así ha sido. La Caixa confirmó hace pocos días la instalación del CaixaForum en el recinto diseñado por el arquitecto Santiago Calatrava.

En definitiva, muchas cosas le quedan por hacer a este Consell si quiere lograr el apoyo férreo de todos los empresarios. A la patronal, por ahora, los tiene de su parte, pero muchos están descontentos con la falta de política económica del Consell.