Barcelona

Hallan un gran edificio, probablemente defensivo, en una antigua ciudad medieval en Calpe

Un gran edificio, probablemente defensivo, ha sido descubierto junto al sistema de acceso al antiguo asentamiento de la época de la Edad Media existente en el municipio de Calpe (Alicante) y conocido como la Pobla Medieval de Ifach.

El diputado provincial de Cultura, Juan Bautista Roselló, y el alcalde de Calpe, César Sánchez, han visitado hoy este yacimiento para conocer los resultados de la campaña estival de excavaciones llevada a cabo por el Museo Arqueológico de Alicante (Marq) en dicho enclave durante los meses de julio y agosto y en la que han participado estudiantes de universidades españolas y extranjeras.

Estos trabajos han permitido hallar una construcción de grandes dimensiones al lado del sistema de acceso a la antigua urbe medieval, que podría haber sido un cuerpo de guardia para las tropas, según han informado fuentes de la Diputación de Alicante.

El edificio, con una anchura de seis metros y una longitud actual superior a los ocho, aunque previsiblemente alcance los dieciséis metros, está dotado con sólidos muros de tapial de mampostería y sillería en las esquinas, puerta y ventanas.

También se han localizado numerosos restos de paredes de yeso con grafitos y marcas incisas realizadas por los habitantes que ocuparon este espacio defensivo, que se cree que fue levantado entre 1305 y 1325, periodo en el que gobernó la Casa de Llúria.

Entre los hallazgos que sostienen esta afirmación se encuentra un fragmento de pared en el que aparece dibujado un caballero medieval que porta un yelmo con cota de malla, un estandarte y un escudo que se corresponde con las armas de la rama ampuritana del Casal de Barcelona.

Entre los avances que se han realizado este verano destaca también el descubrimiento del sistema de acceso original a la pobla, oculto por las sucesivas fases de remodelación de la zona.

Este hallazgo ha posibilitado a los arqueólogos deducir que la puerta se construyó en diversas fases, probablemente entre el principio y el último tercio del siglo XIV.

Además, en las inmediaciones ha aparecido una estancia abierta dedicada al almacenaje de material y herramientas, así como numerosos objetos cerámicos, tinajas, cántaros, platos decorados, metales, vidrios, óbolos y dineros de vellón, las monedas de curso legal más habituales en este periodo de la Edad Media en el Reino de Valencia.

Todos estos descubrimientos se suman a las once tumbas recientemente localizadas en el citado yacimiento que permitirán recabar información clave para entender la vida y las dificultades que atravesaron los colonos que poblaron este asentamiento medieval, construido desde finales del siglo XIII y abandonado a principios del XV.