Comunitat Valenciana

Inspeccionan los olivos de Castellón por su cercanía a un brote de Xylella

El llamado «ébola del olivo» detectado en Mallorca proviene de un vivero de Tarragona

La Comunitat Valenciana cuenta con 95.000 hectáreas de olivos, sobre todo en la provincia de Castellón
La Comunitat Valenciana cuenta con 95.000 hectáreas de olivos, sobre todo en la provincia de Castellónlarazon

El llamado «ébola del olivo» detectado en Mallorca proviene de un vivero de Tarragona

La Conselleria de Agricultura ha encendido todas las alarmas. Los servicios de inspección están trabajando de forma más intensa que nunca en los olivos del norte de Castellón por su cercanía a un brote de la bacteria Xylella fastidiosa, conocida como el «ébola de los olivos». La trazabilidad de los tres cerezos de Palma de Mallorca en los que se detectó la enfermedad la semana pasada, ha desvelado que procedían de un vivero de Tarragona.

Aunque la subespecie de Xylella detectada en Mallorca no corresponde a la que se instala en los olivos, la Conselleria ha considerado pertinente intensificar la vigilancia. Además, esta bacteria afecta a muchísimos otros cultivos, como las plantas ornamentales o los cítricos.

Las organizaciones de agricultores vienen alertando sobre el peligro de esta plaga desde hace meses -la Asociación Valenciana de Agricultores celebró incluso un congreso sobre la misma el invierno pasado. Advertían que, de llegar a España, los efectos podían ser devastadores dada la enorme variedad de cultivos susceptibles de ser atacados por esta enfermedad que apareció por vez primera en la zona de La Puglia, en Italia.

El director general de Agricultura, Roger Llanes, explicó ayer a LA RAZÓN, que la Conselleria puso en marcha en julio pasado un plan de contingencia con dos vertientes. La primera, inspecciones y vigilancias continuas para prevenir y detectar la posible llegada de la bacteria. La segunda es todo un dispositivo de actuación que debería ponerse en marcha en caso de que se descubriera.

Hasta ahora, indicó Llanes, se han instalado ya 1.000 puntos de trampas en cultivos de cítricos y olivos de la Comunitat para recoger insectos. En las 18.000 comprobaciones que se han realizado, se han hallado 38 insectos susceptibles de ser portadores de esta enfermedad, aunque afortunadamente no lo eran.

Aparte, se han tomado muestras en diferentes partes de la región (jardines públicos y privados, viveros) para vigilar de cerca a la bacteria.

Pero para los agricultores todo esto no es suficiente. El secretario general de La Unió de Llauradors, Ramon Mampel, mostró ayer su enorme preocupación por el acercamiento de la bacteria a la Comunitat y exigió un aumento del presupuesto para la lucha contra plagas en los Presupuestos de la Generalitat.

Además, propuso cerrar las fronteras comerciales en los que a vegetación se refiere con aquellos países que ya se encuentran infectados por la bacteria, como Italia, Francia y Alemania. Llanes, por su parte, recordó que la Comunitat Valenciana exporta más vegetación que importa.