Los hosteleros aplauden la pista de hielo en la plaza del Ayuntamiento

Una pista de patinaje en la céntrica plaza del Ayuntamiento de Valencia podría ser el estímulo que necesitan el comercio y la hostelería. Los primeros se reunieron el miércoles con los representantes del Consistorio para convencerles de los beneficios potenciales de una propuesta que cuenta con el apoyo de los bares y restaurantes de la zona.

Así, según la Federación Empresarial de Hostelería de Valencia (FEHV), la iniciativa «puede contribuir a dinamizar el centro, acercar al público familiar y animar el consumo en los comercios y hostelería durante las fiestas».

De momento la idea es sólo eso, pero las tiendas están haciendo lo imposible por que sea una realidad cuanto antes. De hecho, si logran la financiación necesaria -se estima que cuesta 100.000 euros- «lo ideal» sería que ya estuviera operativa estas Navidades. Sin embargo, y teniendo en cuenta las circunstancias económicas, lo más probable es que tengan que esperar a 2014 para ver su deseo cumplido.

Y es que los intereses de los comercios chocan en algunos puntos con las directrices del Gobierno de Rita Barberá, que no quiere que la emblemática plaza se convierta en un escaparate publicitario. La pista de patinaje podrá estar patrocinada, pero nada de luces ostentosas ni grandes carteles anunciando refrescos de cola o comida «fast food». «Ni sushi, ni chocolate», decía el año pasado. La alcaldesa quiere «algo digno» al estilo del Rockefeller Center neoyorquino. Aunque entonces no descartaba que este enclave albergara un mercadillo «controlado, con tiendas dignas» y de productos típicos de esta época festiva, parece ser que actualmente apuesta más por su ausencia.

Tampoco podrá ser una pista cubierta, ya que la primera edil no renuncia a instalar en mitad de la plaza y como es tradición, el árbol de Navidad y el belén.

El «sí» de Barberá satisfaría las pretensiones de los comercios «sin costar un euro a las arcas municipales», tal y como pretende.

Los comerciantes aseguran que ya han hablado con empresas interesadas en correr con los gastos, pero no han querido hacer pública marca alguna hasta tenerlo todo atado.