Más del 25 por ciento de los niños tiene algún problema de sueño a lo largo de su infancia

Los expertos aconsejan hacer ejercicio físico, pasar por una fase de desconexión y dormir al menos ocho horas. Los pediatras advierten que las rabietas forman parte del desarrollo natural

Expertos médicos de pediatría y cuidado de la infancia han advertido de que no hay atajos en el terreno de la salud y han destacado la necesidad de desterrar mitos en ámbitos como la alimentación, el sueño y el comportamiento infantil a través de la información y el conocimiento científico.

Según los expertos, uno de cada cuatro niños tendrá problemas relacionados con el sueño durante sus años de infancia, y menos del 10 por ciento alcanza unas condiciones para garantizar la calidad del sueño, por lo que el jefe de Pediatría del Hospital Quirón de Valencia, Gonzalo Pin, aconseja seguir una serie de pautas que faciliten el descanso infantil.

Hacer ejercicio físico, pasar por una fase de desconexión y dormir alrededor de ocho horas son tareas fundamentales, segun el pediatra, quien destacó que los problemas relacionados con el sueño son uno de los retos más frecuentes a los que se enfrentan los padres.

No solo se trata de cuánto se descansa sino también de cuándo, de las regularidades en los horarios. Los ritmos de la actividad física, la alimentación y algunas condiciones externas como la luz o la temperatura generan equilibrios o desequilibrios que favorecen o impiden el sueño.

También es importante lo que se haga antes de que el niño duerma, «la desconexión, y la comunicación para que el niño se vaya desactivando y le facilitemos el sueño».

En el I Encuentro con las Familias del Hospital Quirónsalud, Pin subrayó la importancia de regular el uso de las tecnologías en las habitaciones de los niños y en las horas cercanas al sueño, y advirtió de que no debería haber ningún tipo de aparatos y que tendría que usarse por última vez, al menos, una hora y media antes del sueño».

El especialista reconoció que la extensión de las nuevas tecnologías influye negativamente en los hábitos de sueño, pero reivindica la importancia de «nuevos hábitos de vida saludable como la desconexión, lo que antes se llamaba meditación, que consiste en dejar que la mente fluya y observar», algo que ha consideró fundamental.

Momentos antes de ir a la cama es muy importante la afectividad y el estado de ánimo, dado que un niño estresado o enfadado no va a dormir.

En la jornada también se trató la alimentación infantil, para la que los expertos aseguraron que «no hay atajos» para llevar una vida saludable. Y también las rabietas y cómo abordarlas. Para Lucía Galán es importante que los padres entiendan que es un proceso normal de los niños y aconseja a los adultos gestionarlas desde la serenidad y el respeto y ser consciente de que es «imposible» solucionar un conflicto desde los gritos y las amenazas. También hay que observar el tipo de rabieta para saber cómo actuar, si poner límites o esperar a que se calme.

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