«La Justicia debe actuar con rapidez y transparencia en el "caso Bárcenas"»

Tras su intervención inicial, el presidente de la Comunidad de Madrid respondió a las preguntas de tres periodistas: Gloria Lomana, directora de informativos de Antena 3; Javier González Ferrari, presidente de Onda Cero, y Francisco Marhuenda, director de LA RAZÓN.

–GLORIA LOMANA: Respecto a la financiación autonómica, ¿hasta dónde está dispuesto a llegar hasta que le den lo que usted cree que le tengan que dar?

–IGNACIO GONZÁLEZ: He dicho desde el primer día que este modelo de financiación no se sostiene. Ya no lo defiende ninguna comunidad, ni lo defiende el Gobierno, porque es un modelo que no satisface a nadie. Es absolutamente injusto, opaco, poco transparente y produce resultados absurdos. Hay datos sorprendentes, como, por ejemplo, que en 2013 arroje un resultado en el que, en términos relativos, crezca más el IVA que se recauda en Andalucía que en Madrid o que nosotros tengamos una caída seis veces mayor de consumo de carburantes que una comunidad equivalente a la nuestra como Cataluña. Hay un compromiso del presidente del Gobierno en la Conferencia de Presidentes para revisarlo y creo que se va hacer. Vamos a seguir exigiendo, lógicamente, que esa penalización injusta que no tiene ninguna razón de ser para los madrileños llegue al final. Espero que el modelo de financiación sea un modelo transparente y que reconozca la capacidad económica de cada uno con independencia luego de las contribuciones a la solidaridad que nosotros, por supuesto, no rechazamos. Pero si se sigue haciendo un modelo de financiación que perjudique claramente a Madrid yo me opondré.

–G. L.: Bárcenas en la cárcel, ¿se ha pasado la línea roja?

–I.G.: No sé si por línea roja entendemos el hecho de la notoriedad de que el tesorero de un partido sea imputado por unas actuaciones que están sujetas a la investigación judicial y que descubramos que tiene una fortuna bastante importante en cuentas en el exterior. Desde ahí empieza cualquier línea roja, ¿no? En ese tema necesitamos actuar con celeridad, con transparencia y, sobre todo, exigir que la Justicia actúe con mayor rapidez. Todos los casos de corrupción son condenables, hay que perseguirlos y exigir responsabilidades a quien las tenga, pero, sobre todo, no podemos mantener estos casos abiertos años años y años, dando la sensación de que no se actúa con contundencia, rotundidad, llegando hasta el fondo y exigiendo responsabilidades. Eso es lo que creo que más daño hace a la sociedad, a los partidos, a los políticos, y da una sensación de mal funcionamiento de nuestra Justicia, que en estos casos debería ser ejemplar. Hasta ahora parece que hay más cuestiones que se refieren a la actuación personal del señor Bárcenas que a la financiación del partido, pero, en todo caso, se debería llegar cuanto antes al fondo, juzgar cuanto antes el asunto, exigir responsabilidades y poner las penas que le correspondieran.

–JAVIER GONZÁLEZ FERRARI: ¿Por qué está calando en la ciudadanía que lo que se está haciendo con la Sanidad en Madrid es privatizar?

–I.G.: Estamos ante un tema de enorme sensibilidad para los ciudadanos y en el que es mucho más creíble lo que puede decir un médico en la consulta a un paciente que lo que podamos decir cualquier responsable público en un medio de comunicación. Contamos con una actuación poco presentable de la oposición, que está en una campaña muy fuerte de mentir, engañar y amenazar incluso a los empresarios que quieren tomar parte en esta posibilidad de hacer una gestión externa de la Sanidad que, por otra parte, ya existe en toda España. No estamos privatizando la Sanidad. La Sanidad en Madrid es universal, pública y gratuita y de una extraordinaria calidad. No es la primera vez que externalizamos la gestión de servicios sanitarios, ya lo hicimos hace algunos años con cuatro hospitales. Primero, la Fundación Jiménez Díaz, y hace algunos años pusimos en marcha tres hospitales de gestión privada como son los de Móstoles, Torrejón y Valdemoro. Dan la misma cartera de servicios, prestan una asistencia de calidad gratuita y tienen un altísimo grado de satsifacción entre los ciudadanos. Eso mismo se lleva haciendo en Cataluña desde hace años con más del 50% de la prestación sanitaria. Se hace en Anadalucía, en Asturias, en Navarra, se hace en todos los sitios. ¿Usted cree que es serio que en un país moderno donde la seguridad jurídica es un valor fundamental el líder de la oposición se dedique a mandar burofaxes a las empresas del sector sanitario diciéndoles que, como se presenten a un concurso público, si él ganara algún día –que está por ver– les quitaría ese concurso? ¿Quién va a venir a invertir en un país donde los responsables públicos estén lanzando esos mensajes? Yo creo que eso les descalifica para tener cualquier tipo de responsabilidad.

–J.G.F.: De la misma forma que Bruselas le ha dado a España más tiempo para ajustar el déficit, ¿no es justo también que el Estado le dé ese margen, dependiendo de cómo tenía el déficit cada una, y no de si ha hecho los deberes?

–I.G.: Si no depende de cómo uno haya hecho los deberes, entonces el incentivo es hacer pocos deberes para que me flexibilicen el máximo posible el cumplimiento del déficit, y eso es lo que no puede ser. Otra cosa es que haya que rebajar el objetivo de déficit para llegar a la convergencia en un tiempo mayor porque no se puede digerir todo en poco tiempo. Pero todas las administraciones tenemos que jugar con unos criterios iguales. Hay administraciones como la nuestra que desde 2008 hemos estado haciendo fortísimos recortes en el gasto público, hemos tenido que hacer ajustes, hemos tenido que reducir la Administración, hemos tenido que quitar organismos... Somos una comunidad que en el objetivo de reducción del sector público estamos ya al 95% del grado de cumplimiento. Si eso no se reconoce, y aquel que no ha hecho esos deberes y lo que ha hecho es gastar mucho más se va a ver beneficiado de una manera especial, desde luego nadie tendrá mucho interés en apretar para conseguir ese objetivo de déficit. Lo segundo, es evidente que eso no puede ser a cambio de renuncias a planteamientos que nada tienen que ver con la financiación y que van más allá, planteando cuestiones que afectan a la integridad del Estado. Eso, bajo ningún concepto. Y en tercer lugar, lo que no puede ser es que unas administraciones tengan que reducir su objetivo de déficit año a año, y que a otras administraciones les crezca. Si las comunidades tenemos que reducir año tras año nuestro déficit, el Estado y las corporaciones locales tienen que hacer lo propio. Lo contrario, creo que sería una señal malísima.

–FRANCISCO MARHUENDA: Cuando el PP no gobernaba en España, ustedes estaban en la vanguardia en materia educativa. Las reformas educativas planteadas ahora se han convertido en polémica. ¿Cuál es su planteamiento en esta materia?

–Tenemos un criterio claro y lo hemos tenido siempre. Queremos una Administración reducida, eficiente y que priorice el gasto social. Y en eso, no cabe duda de que la Educación es un aspecto esencial. En España sólo hemos tenido leyes socialistas en materia de Educación que nos han llevado a unos resultados académicos desastrosos. Lo primero que nosotros pusimos en marcha, con gran rechazo de la oposición fueron las pruebas de conocimiento. Nos dijeron que estábamos diferenciando a unos alumnos de otros, entre colegios. Después decidimos que había que mejorar la enseñanza del inglés. Introdujimos el programa bilingüe y nos dijeron que lo hacíamos para beneficiar a los ricos, cuando realmente lo que hacíamos era evitar que fueran sólo los ricos los que que pueden ir a colegios privados bilingües. Luego vino la autoridad del profesor y la última que hemos hecho ha sido la que tiene que ver con la selección del profesor. Mañana vamos a celebrar las oposiciones para 350 maestros y hemos sido atacados por haber cometido la «fechoría» de exigir que para dar clase en un colegio tenga que sacar un cinco en la oposición. Quiero dar un dato, que ya sé que no es políticamente correcto, pero que es muy significativo. Hace dos años hicimos una prueba escrita por primera vez en las oposiciones. Exigíamos para aprobar que no hubiera más de cinco faltas de ortografía. De 17.000 personas sólo la pasaron 1.700. Vamos a seguir tratando que nuestro sistema forme a profesionales que puedan competir en este mundo cada vez más complejo, y lo vamos a hacer especialmente en la Formación Profesional para que sean las empresas las que nos digan qué tipo de formación tenemos que dar a esos alumnos, que son las que demanda el mercado de trabajo.

–F.M.: Madrid es la comunidad más importante y emblemática de las que gobierna el PP. Usted antes de dos años tendrá que afrontar el reto de presentarse a estas elecciones, ¿hay riesgo de perder Madrid?

–Todas las encuestas que hemos conocido arrojan un desgaste de los que estamos en el Gobierno por la crisis y las medidas duras que se están tomando. Sin embargo, creo que en estos momentos vamos a empezar a ver resultados y eso nos va a permitir cambiar la tendencia y la situación que existe en el país. La gente lo está pasando muy mal y eso se traduce en un desapego hacia la clase política. También es cierto que el ambiente en el que vivimos con noticias de corrupción tampoco ayuda. Los datos de empleo de mañana en Madrid van a confirmar la tendencia del anterior mes de que se crea empleo en todos los sectores y también empleo juvenil y yo creo que esta tendencia nos va a permitir recuperar la confianza de sus militantes. Cuanto volvamos a la senda del crecimiento recuperaremos esa base electoral que es la que nos ha dado las victorias en los últimos años.