Nuevos parquímetros para acabar con la tiranía del cambio

Ya están aquí los nuevos parquímetros «galácticos» que, ya en la zona de Cea Bermúdez, sorprendieron a los usuarios del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER). Se trata de tres nuevos modelos, distintos según la zona, en los que habrá que teclear mucho para poder aparcar pero, a la vez, ofrecen muchas más ventajas que los tradicionales. La primera y más importante: que ya no hace falta tener el cambio exacto para el tiempo deseado. El parquímetro «guardará» el importe sobrante en un «monedero virtual» para usarlo en otra ocasión y, además, se podrá pagar con tarjeta, con el teléfono móvil y con tarjeta prepago.

Hasta ahora era necesario llevar la cantidad exacta de euros correspondientes al tiempo de aparcamiento puesto que las máquinas de pago no devolvían cambio. Tan sólo en algunos barrios se había posibilitado el pago por móvil que, además, permitía renovar el tique sin tener que acudir de nuevo al parquímetro. Los nuevos tótem del SER permiten ahora, al pagar en efectivo, seleccionar el importe exacto que queremos pagar y «guardar» lo que no gastemos para poder usarlo en otra ocasión. Puesto que, cada vez que paguemos, debemos introducir la matrícula, ese dinero sobrante se asociará a esta para la próxima vez.

Además, si no tenemos dinero encima, todos los nuevos parquímetros, que ya se están instalando en toda la zona SER, permiten otros tres métodos de pago: tarjeta de crédito, aplicación móvil y tarjeta prepago. Cada uno de los tótem cuenta con una ranura para la tarjeta de crédito y, en el caso de la prepago, un detector «sin contacto». Asimismo, las aplicaciones móviles EYSAMobile, Telpark y e-park permitirán pagar sin tique y, gracias a una alarma, renovar la estancia sin tener que moverse. De hecho, este mes ya está disponible este método de pago en todos los parquímetros de Madrid, tanto los nuevos como los convencionales.

Actualmente se están instalando los nuevos parquímetros junto a los antiguos, para que los ciudadanos vayan familiarizándose con ellos. Pronto desaparecerán los antiguos y habrá que utilizar el nuevo teclado para pagar, hasta el 1 de julio, las tarifas actuales del SER (zonas azul o verde y tramos valle o punta). Pese a lo que parecen, las pantallas no son táctiles y todos los datos deben introducirse a través del teclado. Se seleccionará si es zona verde o azul, se introduce la matrícula y el método de pago y se abona la cantidad correspondiente. El tique en los nuevos parquímetros también cambiará, tendrá más datos del vehículo y se leerá en vertical en lugar de en horizontal como hasta ahora. Además los usuarios de las tarjetas de crédito podrán imprimir un recibo del pago del SER.

Esta implantación se hará progresivamente para que, a partir del 1 de julio, entren en vigor las nuevas tarifas del Servicio de Estacionamiento Regulado que establecen el precio por aparcar según la tecnología del vehículo y el grado de ocupación del barrio. Con el número de la matrícula el parquímetro accederá a las bases de datos de tráfico para conocer si utiliza combustible diésel, gasolina o es híbrido y, a continuación, aplicará el precio según también el número de coches que estén aparcados en la zona.

Quien contamina paga

«Por primera vez en una ciudad, los vehículos con menos emisiones de óxidos de nitrógeno serán bonificados en la tarifa y, en coherencia, se penalizará con una tasa más elevada a los vehículos más contaminantes, según el principio medioambiental de quien contamina paga», explicó la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, que ayer presentó los nuevos parquímetros junto con los representantes de las empresas concesionarias del SER. La capital española es la primera ciudad del mundo que aplica el criterio medioambiental para el pago del aparcamiento en una clara apuesta por la reducción de emisiones de óxidos de nitrógeno, según detalló la regidora.

Asimismo, Botella defendió la implantación del SER que, desde su puesta en marcha en 2006, ha demostrado su eficacia como herramienta disuasoria del uso del vehículo privado para acceder a la almendra central. De hecho, se calcula que han dejado de entrar a diario unos 200.000 vehículos desde que existen. «Los últimos informes de Movilidad revelan que cuatro de cada diez madrileños que tienen coche dejan el vehículo en casa y optan por utilizar el transporte público, aludiendo al SER como motivo para adoptar esa decisión», indicó la alcaldesa.

Nuevas tarifas desde el 1 de julio

Los parquímetros se han renovado para poder aplicar las nuevas tarifas que, desde el próximo 1 de julio, cobrarán el aparcamiento según lo que contamine el vehículo y la ocupación del barrio. Los usuarios tendrán que introducir su matrícula y, según la tecnología de su automóvil –híbrido, gasolina o diésel– tendrá un descuento del 20% o el 10% en la tarifa base, pagará lo mismo o tendrá que pagar un 10% o un 20% de recargo por ser un coche muy contaminante. A esto se añadirá si hay pocos vehículos aparcados en la zona (20% 0 10% de descuento) o muchos (10% o 20% de recargo). Además se podrá aparcar hasta cuatro horas en zona azul y dos en la zona verde y se crearán zonas de larga estancia.

El manual

La importancia de la matrícula

- El nuevo SER cambia también la forma habitual de pagar por el aparcamiento. Ahora habrá que escoger primero si es zona verde o azul (teclas 1 o 2) y, después, introducir y confirmar la matrícula del vehículo. A continuación se escoge el método de pago y se selecciona el importe a pagar según la tarifa que nos indique el parquímetro. También podremos escoger (teclas + o -) si queremos pagar más o menos que el importe introducido en efectivo o con la tarjeta prepago, que tiene un lector sin contacto. Además, si el pago es con tarjeta de crédito se podrá pedir además del tique habitual, un recibo del pago.