Una manada disgregada deja seis heridos leves en el encierro de «Sanse»

El segundo encierro de San Sebastián de los Reyes ha concluido con seis heridos leves que han sido evaluados por el Summa y ya han sido dados de alta, tras una carrera que ha durado dos minutos y 58 segundos y en la que los animales han corrido disgregados

El segundo encierro de San Sebastián de los Reyes ha concluido con seis heridos leves que han sido evaluados por el Summa en los puestos médicos y ya han sido dados de alta, tras una carrera que ha durado dos minutos y 58 segundos y en la que los animales han corrido disgregados desde la mitad del recorrido.

Las reses, de la ganadería Torrealba, han entrado notablemente separadas en la plaza un minuto y 58 segundos después del cohete de salida, pero han permanecido en la plaza un minuto más, aunque no ha habido incidentes y los pastores les han conducido a los toriles.

La carrera ha contado con 1.200 corredores y una gran afluencia de público, mayor que otros días, ya que hoy se celebra la fiesta local de San Sebastián de los Reyes.

El responsable de seguridad del encierro, Pedro Martínez, ha apuntado en una rueda de prensa posterior a la carrera que los seis heridos han sufrido heridas leves por abrasiones y laceraciones en la mano y en las brazos, como resultado de las propias caídas.

Sin embargo, no ha habido lesionados por asta de toro ni por varetazos de los pitones, lo que ha facilitado su alta médica unos minutos después.

El director del encierro, Eduardo Flores, ha ensalzado que esta carrera ha contado con novillos "más vivos", porque tienen un año menos que lo habitual.

Sin embargo, dos toros y dos bueyes se han quedado "demasiado lentos", especialmente en el tramo final del circuito, aunque eso no ha impedido que haya habido "carreras buenísimas"desde la mitad del recorrido, especialmente a partir de la calle Real.

Flores ha subrayado que en la calle Estafeta se ha cruzado algún corredor delante de la manada, algo "difícil y no recomendable", aunque en este caso estaba justificado porque las talanqueras no permitían su salida rápida.

No obstante, en esa vía, que desemboca en la plaza de toros, se han repetido varias carreras "muy buenas", en las que los participantes han podido correr entre las reses.

Por otro lado, los técnicos del encierro han previsto que mañana no se utilicen los mismos bueyes, en vista de que han corrido "demasiado rezagados", lo que puede llegar a provocar momentos de riesgo.

El responsable de Protección Civil ha argumentado que "es difícil"que se den esos momentos de peligro porque algún animal se quede atrasado, porque los pastores "saben cómo reconducirlos"y mantener la manada compacta.

"La posibilidad de que el toro embista se produce cuando uno los animales se separa notablemente y se fija en alguna persona", ha añadido Martínez, quien ha puesto en valor la "importantísima labor"de los pastores para asegurar que el grupo de animales vaya junto y no se produzcan esos episodios.

También ha celebrado que hoy no se hayan registrado tapones a lo largo de la carrera, a diferencia de lo que ocurrió el martes, cuando el barro que había en la entrada de la plaza de toros provocó numerosas caídas, aunque no hubo incidentes ni heridos.

Martínez ha explicado que existen mecanismos especiales que se pondrían en marcha en caso de que se produzcan esos tapones, como utilizar los huecos de las talanqueras por los que se puede arrastrar a los posibles heridos fuera del recorrido.

Los encierros de este año cuentan con un nuevo operativo de seguridad con 400 efectivos, con mayor presencia en las noches y en los encierros, en el marco del cual los agentes tratan de despejar la manga de la carrera de personas que no estén en condiciones de correr delante de los toros. Efe