San Blas
Urbanismo da luz verde a crear un campus en la quinta de Torre Arias
La concesión se debe hacer mediante concurso público y siempre y cuando no se obstaculice el acceso a la zona
La concesión se debe hacer mediante concurso público y siempre y cuando no se obstaculice el acceso a la zona
El área de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid ha dado respuesta a la consulta que realizó la Universidad de Navarra sobre la posibilidad de utilizar uno de los edificios de la quinta de Torre Arias para acondicionarlo como sede de sus cursos, máster y posgrado. Según los técnicos de Urbanismo, sí es posible la creación de un campus universitario en los inmuebles de la quinta puesto que, al estar en una zona verde, tan sólo se puede admitir su uso para equipamientos culturales o educativos.
Eso sí, no se podrá instalar la Universidad de Navarra mediante la cesión del espacio puesto que se trata de algo «jurídicamente imposible, ya que se trata de una zona verde que debe ser abierta a todos los ciudadanos», según explicó la delegada de Urbanismo y Vivienda, Paz González, en el último pleno municipal. La fórmula para permitir el equipamiento educativo será a través de concurso público.
Una vez que Urbanismo ha dado el visto bueno para que una universidad, ya sea la de Navarra o cualquier otra, pueda acondicionar uno de los inmuebles como sede de sus cursos, la cuestión pasa a ser competencia del área de Hacienda en tanto en cuanto se trata de edificios protegidos que son responsabilidad de Patrimonio.
De este modo, el área que dirige Concepción Dancausa será la que se ocupe de elaborar los pliegos con las condiciones para que se pueda llevar a cabo el concurso público al que puedan acceder todos los organismos educativos interesados en la quinta. Entre las condiciones fundamentales estará que no se puede obstaculizar de ningún modo el acceso a la zona verde ya que el convenio suscrito con la propietaria de la finca, Tatiana Pérez de Guzmán el Bueno, establecía que la cesión al patrimonio municipal de los terrenos se haría siempre y cuando se abrieran al público como parque urbano.
El Área de Medio Ambiente está estudiando actualmente la zona verde de Torre Arias para ver qué trabajos son necesarios para poder abrir el parque al público en las mejores condiciones.
Actualmente se está comprobando el estado de los árboles y maleza así como de los caminos, puesto que será necesario acondicionar la zona para garantizar la seguridad de los visitantes. Según explicó a Madridiario esta semana la concejala del distrito de San Blás en el que se ubica la finca, Almudena Maillo, está previsto que el parque se abra a los madrileños dentro de poco más de un año, durante la primavera de 2015.
De forma paralela, Urbanismo está estudiando el Plan Especial que ordenará el espacio, puesto que la quinta está recogida en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) como zona verde con nivel 1 de protección pero no tiene ninguna regulación para las edificaciones existentes.
Dado que el PGOU establece que en una zona verde sólo son compatibles los equipamientos culturales o educativos, el Plan Especial recogerá estos usos para los edificios de Torre Arias. De este modo, el concurso público para la concesión de estos inmuebles para una universidad no se podrá poner en marcha hasta que el Ayuntamiento de Madrid no haya aprobado el Plan Especial para la quinta.
La finca, de 16 hectáreas de extensión, alberga un palacio, de 26 por 26 metros de planta, con dos pisos –más desvanes y cueva– que es el que ha despertado el interés de la Universidad de Navarra.
Se trata de un inmueble de ladrillo rojo visto rematado con una torre que cuenta con un reloj parisino y unas 14 habitaciones, según los últimos inventarios. En la finca también hay unas cuadras, varios invernaderos y una segunda vivienda más pequeña en la que vivió la condesa de Torre Arias hasta su muerte en 2012.
Según explicó la Universidad de Navarra en una nota de prensa, cuando se formalizó la cesión de la finca al Ayuntamiento de Madrid en julio de 2013, la institución se interesó por el palacio como sede de los máster que actualmente se imparten en la capital en la calle Zurbano e, incluso, los que se dan en la sede del IESE en Aravaca. «La Universidad se encargaría de rehabilitar los edificios de la quinta a cambio de la concesión de su uso para actividades formativas», explicaron desde el campus situado en Pamplona.
Se trata de una zona muy bien situada que, además les permitiría ampliar la oferta docente de la universidad al mismo tiempo que revitalizaría el barrio y crearía puestos de trabajo.
Además, a unas pocas manzanas, la Clínica Universitaria de Navarra, vinculada a la Universidad, está construyendo una nueva sede que sustituiría a la actual policlínica que está situada en Plaza de Castilla. «Todavía no hemos visitado la finca pero creemos que podemos hacer un buen trabajo de rehabilitación que permitirá el aprovechamiento de los inmuebles, que cuentan con 5.300 cuadrados de superficie», señalaron.
Sin embargo, puesto que el proceso de concesión se debe realizar mediante concurso público que, como tal, está abierto, cualquier entidad universitaria o que tenga un proyecto educativo para el palacio puede concurrir para hacerse con el uso de estos edificios.
La antítesis de la ostentación
La vida de la propietaria de esta gran finca estuvo marcada por la discrección. De hecho, no era famosa a fuerza de empeño en evitarlo, porque motivos no le sobraban. Quienes la conocieron aseguran que, a pesar de su inmenso patrimonio, Tatiana Pérez de Guzmán el Bueno era la antítesis de la ostentación. Ella se preocupaba por compartir parte de sus 500 millones de euros con todo lo que tuviera que ver con la cultura y la naturaleza, entre otros campos. Era una mujer tremendamente discreta, hasta el punto de que no acudía a actos ni ha trascendido ninguna foto suya. A pesar de ser descendiente de una de las estirpes más famosas del mundo (Cristóbal Colón era antepasado directo suyo) su único momento público fue cuando se casó con el conde de Torre Arias.
Se estudian becas para que los vecinos de San Blas hagan máster
En las reuniones entre la Universidad de Navarra y la Junta de Distrito de San Blás para estudiar la posibilidad del uso de los edificios de la Quinta de Torre Arias, fuentes municipales explicaron que se puso sobre la mesa la posibilidad de ofrecer una serie de becas anuales a los vecinos del distrito para que pudiesen cursar alguno de los máster o posgrado.
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