Sucesos

Detenido el gerente de una empresa por amenazas graves a una subinspectora que quería revisar sus contratos

Tras recibir las amenazas y temiendo que estas se pudiesen cumplir, la subinspectora puso en conocimiento de Policía Nacional lo ocurrido

Vehículo de la Policía Nacional
Vehículo de la Policía NacionalPOLICÍA NACIONALPOLICÍA NACIONAL

La Policía Nacional ha detenido al gerente de una empresa por proferir amenazas graves a una subinspectora de Trabajo y Seguridad Social que se había puesto en contacto con él para revisar unos contratos, según informaron fuentes del citado Cuerpo en un comunicado.

El individuo, un varón de nacionalidad española de 38 años de edad, ha sido detenido como presunto autor en la comisión de delito de amenazas graves.

Los agentes de la Unidad Contra Redes de Inmigración y Falsedades documentales de la Policía Nacional (UCRIF) trabajan a diario con personal de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, conforme a los convenios de colaboración establecidos, investigando actividades delictivas relacionadas con la Trata de Seres Humanos, tráfico de personas, inmigración ilegal y las falsedades documentales, así como los delitos conexos, siendo uno de los más comunes la explotación laboral.

En esta ocasión, la Subinspectora de Trabajo realizaba una entrevista telefónica al gerente de una empresa a fin de llevar a cabo una revisión de los contratos en vigor de dicha empresa. Fue entonces cuando el empresario mostró “agresividad” en forma amenazas formuladas hacia la funcionaria.

La conversación telefónica fue subiendo de tono, no solo por el volumen empleado por el gerente de la empresa, sino también por la agresividad en su tono. Así, al parecer, pronunció las amenazas contra la trabajadora.

La víctima, gravemente intimidada por el miedo de que el interlocutor pudiera llevar a cabo lo manifestado, contactó con Policía Nacional, que de inmediato se trasladó en busca del presunto autor, localizándolo, identificándolo y procediendo a su detención.

Finalmente, el detenido al ser oído en declaración en sede policial, reconoció los hechos y manifestó su pleno arrepentimiento, siendo puesto en libertad y comunicado al juzgado de instrucción en funciones de guardia todo lo actuado.