El «viaje a ninguna parte» del populismo

«Las promesas inviables pasan facturas muy altas». Así de categórico se mostró ayer el presidente del BBVA a la hora de valorar la alternancia política tras las elecciones del 24 de mayo, y la llegada de los populismos. Francisco González puso como ejemplo a Grecia, que se encuentra en un laberinto de difícil solución, y subrayó que, en casos así, «siempre son los más débiles los que pagan las consecuencias». El crecimiento sólo pasa por el esfuerzo y el trabajo. No hay atajos demagógicos, como predican algunos de manera irresponsable.