España en Verano: El verdadero rostro de las princesas Disney

Pocos saben que para encontrarse con la verdadera Sirenita no hay que acercarse al océano, sino pasear por Hollywood. Más del 70 por ciento del metraje de la mítica película de Disney fue rodada con personajes reales, delante del típico croma verde, y, a partir de esas imágenes, los animadores dibujaron la trama tanto fuera como dentro del mar. Cuando uno sabe que va a conocer a la actriz real en la que se basó el personaje, al principio, se muestra bastante escéptico, pero una vez que tomas contacto visual con Sherri Stoner no puedes dejar de sorprenderte por el extraordinario parecido entre ambas (la animada y la real), a pesar de que han pasado más de veinte años del rodaje. No solo su cara es todavía la misma, sino que hay algo de su encanto, de la forma de hablar y moverse (aún similar a la de una adolescente) que la emparenta directamente con el personaje marino. No se trató simplemente de prestar su voz, sino de crear, desde cero, un personaje de forma bastante desinteresada, pues la imagen final no iba a ser, claro, la suya. A pesar de que pudiera considerarse un trabajo menor en su carrera, Stoner nos recibe para hablar del rodaje y asegura: «Me encanta seguir siendo La Sirenita. Es un gran honor». En apenas unas semanas, cuando llegue el otoño, tomará protagonismo, pues el título regresará a las estanterías de las tiendas –donde lleva años ausente debido a que está descatalogado–, gracias, esta vez, a una versión diamante. Sin embargo, Stoner (quien protagonizó algunos de los episodios de «La casa de la pradera») no fue la única que prestó su físico a este ídolo de jovencitas, pues, al comienzo del largometraje, la sirenita tiene apenas 16 años, por lo que algunas características físicas fueron tomadas de la joven Alyssa Milano, que protagonizó la serie juvenil «Quién es el jefe».

La película inauguró una nueva era dorada en Disney; de hecho obtuvo tres nominaciones a los Oscar después de años en que el cine animación no hacía su aparición en la ceremonia más que de forma testimonial. «Cuando leí el guión me di cuenta de que era algo muy especial», admite la actriz. Está basado en la novela de Andersen, pero hubo que darle un par de vueltas, como cambiar el final, en el que la protagonista muere, para que se adecuara a la filosofía de la compañía. «El cuento original es mucho más oscuro, pero había que hacer un final al estilo Disney», admite Stoner. No es la única, ya que, por ejemplo, en el relato primigenio los personajes no tienen nombres. Además, el tono del relato es mucho más siniestro. Por ejemplo, cuando Ariel se convierte en humana y le salen piernas, la joven experimenta un dolor insoportable en el momento en el que la cola se fragmenta para que deje salir sus extremidades.

Carrey, el príncipe destronado

Aunque no puede darnos respuestas muy claras, pues no participó en la producción, no nos resistimos a comentar con ella que pudo tener como compañero de rodaje al entonces desconocido Jim Carrey, que hizo casting para el príncipe de verdad, aunque no fue admitido. Más allá de los protagonistas, la malvada Úrsula adquiere un gran protagonismo para los seguidores de este título. Su estética, un tanto «drag», y su voz, la resaltan entre ese friso de malas, normalmente bastante estereotipadas, de la factoría Disney. Finalmente, su voz se la prestó Pat Carroll, aunque estuvo a punto de aceptar Joan Collins, en tiempos, más que conocida en España gracias al serial «Dinastía». Los años han pasado y Sherri Stoner no solo recuerda con cariño aquel rodaje, que supuso toda una sorpresa para ella, sino que aquello le sirvió como plataforma para prestar su rostro a otro gran personaje infantil, la protagonista de «La bella y la bestia», aunque su carrera no ha quedado ahí. Según nos cuenta, para ella ha sido fundamental la actuación teatral, de hecho, sigue perteneciendo a la compañía Groundling, un grupo de improvisación de Los Ángeles, una disciplina que ya practicaba entonces. Esto le ayudó sobremanera a la hora de enfrentarse a un trabajo difícil como filmar sin apenas elementos, por ejemplo, se recreaban los animales del fondo del mar «con pelotas y otros objetos que encontramos en el estudio. Todos los talleres que había realizado con el grupo de improvisación me ayudaron a visualizar más fácilmente los objetos y animales que existirían en la versión final».

La vinculación de Sherri con Disney no se remite al pasado, nos relata su emoción por el debut como guionista de «The 7D», una nueva serie de animación, junto a Tom Ruegger. Pero volviendo a su faceta como Sirenita en la sombra, Stoner describe cómo su participación en el filme aún despierta emoción en los jóvenes de hoy: «Una de las amigas de mis hijos entró en el salón y vio uno de los dibujos que me habían hecho durante el rodaje se dio cuenta de que era yo y empezó a gritar».