10 consejos para ahorrar al volante

Los vehículos de hoy en día incorporan dispositivos más eficientes que los de hace diez años atrás. Por ejemplo, están preparados tecnológicamente para reducir un 30% de emisiones en la atmósfera. Estos mecanismos sorprenderán a los conductores con diferentes beneficios, pero sólo si éstos tienen una buena actitud al volante que se consigue con los siguientes consejos:

1- Arrancar el motor sin pisar el acelerador e iniciar la marcha inmediatamente. En cambio, en motores turboalimentados hay que esperar unos segundos.

2-Usar únicamente la primera marcha para el inicio de la marcha.

3-Según la velocidad, la 2ª marcha se utiliza los dos primeros segundos, la 3ª a partir de unos 30 km/h, y para cada 10 km/h más se utiliza una marcha más hasta la última (comúnmente la 6º).

4- Circular lo más posible en las marchas más largas y a bajas revoluciones.

5- Mantener la velocidad de circulación uniforme buscando fluidez y evitando frenazos, acelerones o cambios de marcha innecesarios.

6- Realizar la desceleración, levantando el pie del acelerador y dejar rodar el vehículo con la marcha seleccionada en ese instante. Posteriormente, frenar de forma suave con el pedal de freno y por último reducir la marcha lo más tarde posible.

7- Siempre que sea posible, la detención debe realizarse sin reducir previamente de marcha.

8- En paradas largas es recomendable apagar el motor-

9- Conducir siempre con una distancia de seguridad adecuada que te permita ver 2 o 3 vehículos por delante. De esta forma, cuando se vea un obstáculo o se precise una reducción de velocidad hay que levantar el pie del acelerador para realizar las posteriores maniobras.

10- Aplicar estas reglas de conducción eficiente en la mayoría de los casos contribuye al aumento de seguridad vial. Pero si alguna vez existe conflicto entre la conducción segura y eficiente, deberá prevalecer la seguridad.

La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles Turismos y Camiones(Anfac) con estos consejos quiere que los conductores se beneficien de una conducción eficiente: disminución de contaminación acustica, mejora del medio ambiente, reducción del estrés del conductor y ahorro medio de carburante del 15% y de costes de mantenimiento que pueden generar hasta 900€ al año en un vehículo nuevo frente a los 300€ en uno antiguo.