Barcelona

Uno de los 30 detenidos por asaltar a narcotraficantes tenía tres órdenes de búsqueda

La operación se ha saldado con la detención de 30 personas

Un agente revisa el material incautado
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“¿Sois guardia civiles de verdad?”, dijo uno de los arrestados, que se orinó encima, al pensar que los agentes de la Guardia Civil eran otra banda de "volcadores".

Como los miembros de la organización internacional especializada en asaltos violentos a narcotraficantes se hacían pasar por policías para sus robos, los dos días en los que se produjeron las detenciones, el 13 de enero y el 1 de marzo, no se creían que quienes les estaban arrestando eran realmente agentes de la Guardia Civil. Tal es así que cuando tuvieron lugar simultáneamente las detenciones en Málaga, Cádiz y Barcelona (en este caso, por los Mossos), al entrar en los domicilios los "volcadores"(como se llama a los que roban a los narcotraficantes) “se alegraban al saber que éramos guardia civiles”, tal y como explican desde el Instituto Armado.

“¿De verdad que sois guardia civiles?” preguntaron los detenidos pensando que era otra banda de volcadores (como se llama a los que roban a los narcotraficantes)”, precisan las mismas fuentes. De hecho, "uno de ellos se orinó encima, porque seguramente se le pasó por la cabeza la brutalidad con la que ellos actuaban pensando que otra banda les iba a hacer lo mismo”. Violencia que pasa por secuestrar, utilizar pistolas eléctricas en las partes íntimas de los que guardan la droga para que les diesen pistas de donde estaba, etcétera.

Antecedentes policiales

La mayoría de los detenidos cuenta con antecedentes por tenencia ilícita de armas, robos con violencia y delitos contra la salud pública. Entre ellos destaca el caso de José Antonio Orcha Rivera, sobre el que pesaban tres órdenes de búsqueda por delitos violentos, tal y como pudo saber LA RAZÓN. José Antonio sabía que estaba en busca y captura después de que fuera uno de los cabecillas del secuestro de un narcotraficante. Rapto por el que precisamente la Guardia Civil comienza esta operación. El suceso se remonta a finales de verano cuando un narco va a una reunión con el atestado que avala que él no ha robado la mercancía: 700 kilos de hachís.

Sin embargo, no le creen, y le secuestran a eso de las 18:00 horas. A pesar de sufrir problemas de riñón, los miembros de "volcadores"le dan una paliza y no le sueltan hasta la una de la madruga en Sanlúcar de Barrameda. Le dejan en una carretera casi desnudo con bridas y cinta americana. De modo que aunque este narcotraficante hubiera hecho lo posible por no denunciar los hechos, los conductores al verle llaman a la Guardia Civil. Poco tiempo después, en octubre la unidad de la Guardia Civil de Cádiz ya está sobre la pista de esta organización

internacional especializada en asaltos violentos a narcotraficantes que se ha saldado con la detención de 30 personas, la investigación de otras cinco, y 29 registros domiciliarios donde se han intervenido 2.600 kilogramos de hachís, 16 vehículos, más de 60.000 euros en efectivo, seis pistolas, teléfonos móviles y abundante documentación.

Secuestros y torturas

La organización no dudaba en secuestrar y torturar a sus víctimas para exigirles información relativa a ciertos alijos de hachís de los que sabían perfectamente su ubicación, ya que tenían conexiones internacionales con otras organizaciones en Marruecos que introducía en los alijos dispositivos de seguimiento por satélite para ubicar las partidas de droga que se introducían en la Península. Tras dar con ellas, una parte se la llevaban a Francia para intercambiarla por armas de fuego y munición y otra la vendían en España, donde operaban.