Reforma de la Ley del Aborto
El 69,1% de los españoles apoya la protección de los no nacidos
Ocho de cada diez consideran que la izquierda ha politizado el debate sobre el aborto, mientras que el 85% defiende la autorización paterna para las menores
Un plazo de 22 semanas en el supuesto del riesgo para la salud física o psíquica de la mujer, 12 semanas en el caso de violación, acreditación por parte de dos médicos... Más allá de los debates internos dentro del PP y de los que se avecinarán en el Congreso de los Diputados, los españoles ya han dado su veredicto acerca de la reforma de la ley del aborto anunciada el pasado 20 de diciembre por el Gobierno. ¿El resultado? Un apoyo mayoritario para el Ejecutivo presidido por Mariano Rajoy. El 51% de la población se muestra favorable a una ley de supuestos como la emprendida por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón; el 21,1% no acepta la despenalización del aborto bajo ningún concepto, y apenas un 24,3% defiende una ley de plazos similar a la aprobada en 2010 por el Gobierno socialista. De esta forma, siete de cada diez españoles –el 72,1%– muestran su rechazo a la «ley Aído», todavía vigente, y exigen un cambio en la legislación.
Así lo revela la encuesta elaborada por NC Report para LA RAZÓN, en la que, en líneas generales, los españoles se muestran partidarios de limitar la interrupción del embarazo de forma voluntaria a una casos muy concretos. Por franjas de edad, son los jóvenes de entre 18 y 29 años los que apoyan en mayor medida una ley de supuestos, con un 55,2% de respuestas favorables, mientras que los mayores de 65 años son los que más rechazan la despenalización del aborto, con un 27,5% de adhesiones.
Los resultados apenas varían cuando se les pregunta a los encuestados sobre si son partidarios de reformar la ley de plazos actual. Tres de cada diez creen que debe mantenerse la legislación vigente; sin embargo, el 44,6% aboga por una ley de supuestos –en el caso de los más jóvenes el porcentaje supera el 52%–, mientras que dos de cada diez defienden la ilegalización del aborto.
¿Son los ciudadanos favorables a la protección de los derechos de los no nacidos? La opinión al respecto es aplastante: el 69,1% de los españoles es partidario de regular su protección. Un criterio mayoritario en todas las franjas de edad. Incluidos los jóvenes de entre 18 y 29 años: casi siete de cada diez (68,3%) se inclinan por el apoyo al nasciturus.
Una de las novedades del anteproyecto de Ruiz-Gallardón se centra en la prohibición de abortar para los menores de edad si no cuentan con el permiso paterno, eliminando así una de las novedades vigentes desde 2010. A tenor de las respuestas registradas en la encuesta, parece evidente que los españoles clamaban por un cambio: el 85,5% se muestra contrario a que las adolescentes puedan interrumpir su embarazo sin el consentimiento de sus progenitores. Los jóvenes, más sensibles a esta medida, también muestran su apoyo a la novedad introducida por el Gobierno. Así lo piensan ocho de cada diez encuestados de edades comprendidas entre 18 y 29 años.
Intereses partidistas
Con todo, hay ciertos puntos en los que los encuestados se muestran más divididos. Es el caso de la eliminación del supuesto sobre la malformación del feto. Y es que el nuevo texto sólo contempla la posibilidad de abortar por una «anomalía fetal incompatible con la vida» si esta acarrea un riesgo para la salud psíquica de la madre. Un hecho que siempre deberá acreditarse con un informe médico sobre la mujer y otro sobre el feto. Así, a la pregunta «¿cree que cualquier discapacidad del feto es razón suficiente para permitir un aborto?» más de la mitad de los encuestados (52,6%) responde afirmativamente, mientras que casi cuatro de cada diez españoles (38,8%) eliminaría sin dudarlo este supuesto para interrumpir voluntariamente un embarazo.
Asimismo, también hay discrepancias sobre la necesidad de que la madre tenga que acreditar el riesgo para su salud física y psíquica con dos informes emitidos por dos médicos independientes de los que practican el aborto. Las respuestas reflejan que casi seis de cada diez encuestados (58,6%) creen que no es necesaria una segunda opinión médica para interrumpir el embarazo, mientras que el 34,9% sí considera indispensable el veredicto de dos facultativos. Hay que apuntar que este nuevo requisito nace con la intención de terminar con el «coladero» en el que se había constituido este supuesto con la primera ley del aborto, aprobada en 1985.
La discusión abierta desde que se anunció el Anteproyecto de Ley Orgánica para la protección de la vida del concebido y de los derechos de la mujer embarazada no ha pasado desapercibida para los españoles. Sobre todo en lo que respecta a la utilización partidista del problema. De hecho, albergan pocas dudas sobre si la izquierda está politizando la ley del aborto. Ocho de cada diez encuestados (82,3%) creen que se está instrumentalizando electoralmente el debate sobre la nueva legislación, mientras que apenas un 10% mantiene la opinión contraria. Con todo, durante los próximos meses, y con todo el periodo de tramitación por delante, parece evidente que el debate no ha hecho más que empezar.
El Senado avisa a los críticos
En declaraciones a RNE, el portavoz del PP en el Senado, José Manuel Barreiro, consideró ayer «lógicas» las discrepancias entre dirigentes y militantes del PP sobre el anteproyecto de ley. Ahora bien, también aseguró que todos «están obligados a defender» el programa electoral con el que se han presentado y que recoge la reforma. Barreiro cree que estamos ante una reforma «compleja», pues afecta a «creencias, principios, valores y cuestiones de una sensibilidad muy alta». Por ello, considera «lógico» que puedan surgir «posiciones diferentes».
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