Accidente de autobús

El conductor del autobús: «Yo tenía que ser uno de ellos»

El alcalde de la localidad abulense de Serranillos, Carlos Cayuela, se ha referido al conductor del autobús en el que ayer perdieron la vida en Tornadizos (Ávila) nueve personas, como una persona "seria y responsable".

Según el regidor, R.G.S., que es vecino del pueblo (282 habitantes) del que partió la ruta del autocar accidentado a las 7.15 horas, llevaba en torno a tres años conduciendo autobuses, tras una larga experiencia vinculada a la conducción de camiones de gran tonelaje en Guadalajara.

Tras ser puesto ayer en libertad provisional, comunicada y sin cargos por parte de la juez que instruye el caso, Carlos Cayuela pudo hablar con el conductor, de 54 años, que estaba "destrozado"y que dice que "se quiere morir".

Según el alcalde de Serranillos, el conductor, que resultó ileso, "no sabía lo que había pasado", pero tras lo ocurrido trató de rescatar con sus propias manos a algunos de los fallecidos y heridos mientras señalaba: "Yo tenía que ser uno de ellos".

Carlos Cayuela asegura que todo el pueblo se siente "afectado"y "consternado"por lo sucedido y por el hecho de que el conductor sea vecino de esta pequeña localidad a 48 kilómetros al sur de la capital.

Asimismo, ha comentado a Efe que pocos asientos detrás del conductor viajaba una vecina rumana del pueblo que, según su testimonio, sintió "un golpe", como si se tratara de un "reventón", aunque no recuerda el impacto y dice que el vehículo "bajaba bien".