El emocionante vídeo de un marine con Parkinson que recupera la movilidad en un segundo

Un marine con Parkinson avanzado recupera el control de su cuerpo gracias a la electroestimulación. El vídeo es una ventana abierta a la esperanza para millones de pacientes que padecen la enfermedad en todo el mundo.

El Parkinson es una enfermedad degenerativa que consiste en un desorden crónico de una de las partes del cerebro que controla el sistema motor y que provoca una pérdida progresiva de la capacidad de coordinar movimientos, temblor y rigidez muscular. Es la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente después del Alzheimer y en España afecta a unas 150.000 personas. De momento, no se ha encontrado cura pero hay tres tipos de fármacos para ralentizar su avance.

Sin embargo, el rápido desarrollo de la tecnología ha permitido lograr algunos avances prometedores. Es el caso de la Estimulación Cerebral Profunda. El vídeo de un marine británico retirado que padece la enfermedad es un claro ejemplo de ello y se ha convertido en una ventana a la esperanza a los millones de pacientes que lo padecen.

Las imágenes muestran una sesión de terapia, en la que el paciente trata de tocarse la nariz con un dedo o coger un vaso para beber agua. El hombre, con gran dificultad intenta superar ambas pruebas pero los fuertes temblores provocados por la enfermedad se lo impiden. La doctora observa lo sucedido y ajusta unos parámetros en una tablet. En ese momento se produce el "milagro". El hombre deja de temblar y suelta un sonido como de alivio. La doctora le pregunta "¿Te sientes mejor?"y el responde "me siento genial".

En ese momento, doctora y paciente repiten los ejercicios anteriores. El hombre, visiblemente emocionado, logra tocarse la nariz sin dificultad, el dedo de la doctora en varias ocasiones e , incluso, beber agua sin volcar el vaso. En un instante, recupera el control de su cuerpo. Los temblores permanecen, pero de una forma muy leve. La familia del paciente, que observa lo que está ocurriendo, dice "ha vuelto". Nadie puede reprimir las lágrimas, excepto el marine, que luce una gran sonrisa. El tratamiento le permitirá recuperar su vida, podrá valerse por sí mismo y no tendrá que depender de su familia para todo en su día a día. Sólo deberá llevar unos electrodos conectados al cerebro y que se activan con un mando. Su función es estimular la parte del cerebro dañada con una corriente continua de baja intensidad para que la parte motora recupere el autocontrol y para bloquear las señales nerviosas que provocan los temblores. No es una cura definitiva y no detiene la enfermedad, pero esta terapia permite controlar la enfermedad durante una década.

El vídeo, compartido por @kwilli1046 el pasado 11 de octubre, ha sido visto más de 13 millones de veces.