La ley del aborto se debatirá el martes en el Congreso

Los parlamentarios provida mantienen su voto en contra a la espera de una reunión

El próximo martes 14 de abril se debatirá en el Congreso la reforma de mínimos de la ley del aborto para que las menores de 16 años no puedan interrumpir su embarazo sin permiso paterno. Así lo acordó ayer la Junta de Portavoces de la Cámara Baja.

Aunque a lo largo de las últimas semanas, el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, ha mantenido que el grupo cuenta con «suficiente unanimidad», la realidad es que, como ha podido confirmar LA RAZÓN, el grupo de parlamentarios provida que se oponen a esta ligera reforma se mantienen en sus trece y no piensan votar a favor. Eso sí, las mismas fuentes insisten en que «esperamos reunirnos con el grupo antes del martes» por si se puede llegar a algún acuerdo e insisten: «Mantenemos nuestra posición». Es más afirman que «desde que mostramos nuestra postura, estamos recogiendo un mayor número de apoyos del que esperábamos». Eso sí, ninguno de estos diputados en la sombra ha confirmado su voto en contra, pero sí que han demostrado su incomodidad con la reforma que plantea el Gobierno. Así, Hernando garantizó hace unas semanas que los diputados populares tienen libertad de voto, siempre y cuando cumplan con lo recogido en el programa electoral del Partido Popular. «Yo no subo para cogerle el dedo a nadie para que apriete una cosa u otra». Los opositores a la reforma aún esperan que desde el Gobierno les planteen «otras fórmulas» que les lleven a renunciar a la postura que sostienen, ya que consideran que sí que existen formas para contentar a estos grupos.

A pesar de que se debata el próximo martes en el Congreso, los plazos harían que esta reforma coincida con las elecciones municipales porque tras el debate, se abre el plazo de presentación de enmiendas. Tras este periodo volvería al Pleno en unas tres semanas para, después, enviarla a la Cámara Alta y a ésta llegaría, seguramente la semana antes de las votaciones de mayo, por lo que lo más probable es que su tramitación se volviera a paralizar hasta que se decidieran los nuevos alcaldes y presidentes de las comunidades autónomas.

La oposición también se muestra en contra de la reforma ya que, como apuntó ayer el portavoz del PSOE, Antonio Hernando, la decisión del Ejecutivo es «un gran error» porque la actual ley «ha dado buenos resultados» tras reducir el número de abortos en 2013. «No es una ley que haya que cambiar», insistió. Al margen de los grupos de oposición en el Congreso, el PP tampoco cuenta con el respaldo de las asociaciones de mujeres que piden a los parlamentarios que voten en contra. Ana María Pérez del Campo, presidenta de Mujeres Separadas y Divorciadas aseguró a Ep que le parece «curiosísimo» que se esté planteando como «algo trascendente» que una joven de 16 años «tenga que ir forzosamente acompañada» cuando, según la mayoría de las menores «ya van acompañadas» y las que acuden solas lo hacen «porque sufren abusos sexuales de algún familiar». Así, si la reforma continúa adelante, la ley que aprobó el gobierno socialista en 2010 y que recurrió el PP en Tribunal Constitucional se mantendrá igual, salvo por el matiz de que las menores de 16 años tendrán que contar con el consentimiento paterno para poner fin a su gestación.