Denuncian que una mina de oro gallega contaminará «cientos de años»

La plataforma por la defensa de Corcoesto y Bergantiños cifra en 17 millones de toneladas los residuos que contaminarían las aguas del río Anllóns y la ría de Coerme y Laxe "por cientos de años"como consecuencia de la mina de oro que se proyecta en esta zona de la provincia de A Coruña.

Asimismo, esta plataforma ciudadana ha negado que la mina de oro tenga tan solo un impacto "visual", como ha afirmado su director, Francisco Aréchaga.

Aréchaga, director general de la empresa Mineira, afirmó ayer a Efe que esta compañía busca la "licencia social"para su proyecto de explotación de una mina de oro en Corcoesto (A Coruña), por la que el precio "a pagar"sería un "efecto visual temporal". A su juicio, la afección causada a la naturaleza por la minería y la metalurgia asociada es momentánea y se remedia con la rehabilitación.

Sin embargo, la plataforma que se opone a este proyecto señala en un comunicado que la explotación "llevará consigo también la exposición de unas 100.000 personas del entorno al arsénico liberado en el proceso de trituración del material para la extracción del oro, tal y como señalan estudios científicos de la Universidad de Santiago de Compostela".

Añade que "este extremo fue incluso reconocido por parte de las autoridades sanitarias de la Xunta de Galicia en una reciente reunión mantenida con vecinos de Corcoesto y Coristanco en la Consellería de Sanidad".

A estos costes "a los que no se refiere el señor Aréchaga", la plataforma añade "los efectos negativos que esta explotación minera tiene para las actividades agrícolas, ganaderas y forestales e incluso para la granja de vacuno más importante de Galicia, que se encuentra a escasos metros de la proyectada mina de oro".

Para la plataforma, "la actividad minera y más concretamente la minería de oro es una actividad que no es sostenible, precisamente porque agota los recursos, compromete el desarrollo de otras actividades económicas vinculadas a la tierra, contamina el medio natural, tiene una duración muy limitada en el tiempo y, a medio plazo, contribuye a acelerar el proceso de desequilibrio territorial que se está produciendo en Galicia, a través del éxodo de la población de los núcleos rurales".

Además, le pide al director de la futura explotación que, en lugar de hablar de transparencia, la practique, como le demanda también a la Xunta, ya que, a día de hoy, no ha sido capaz -denuncia- de obtener copia de la documentación presentada por la empresa.

"La negativa a facilitarla -subraya- es contraria a la legislación, vulnera los principios de acceso a la información y participación ciudadana y, más grave aún, al de los interesados directos en el expediente administrativo".

Finalmente, acusa a la compañía de "engaño masivo a la población, ocultación de información y persecución a los contrarios a la explotación minera por medio de una asociación denominada "Corcoesto Sí, Mina Sí", que está controlada y financiada por la minera para aparentar un falso apoyo social al proyecto".