Madrid

Perrotón: más de 3.500 personas preparadas para correr, andar y trotar

La Carrera Solidaria por la Adopción y Tenencia Responsable de los Animales de Compañía tendrá lugar el próximo día 16 y recorrerá 4 kilómetros desde la Plaza de Colón de Madrid

Punto de salida, en la madrileña Plaza de Colón, de la carrera solidaria de Perrotón celebrada el año pasado
Punto de salida, en la madrileña Plaza de Colón, de la carrera solidaria de Perrotón celebrada el año pasadolarazon

La Carrera Solidaria por la Adopción y Tenencia Responsable de los Animales de Compañía tendrá lugar el próximo día 16 y recorrerá 4 kilómetros desde la Plaza de Colón de Madrid

«Si tu perro está gordo, tú no estás haciendo suficiente ejercicio», dice un refrán anónimo. Pero no será por falta de iniciativas. La necesidad de cierto dinamismo para mantener la salud es uno de los múltiples puntos en que coinciden el hombre y el perro. Si además tenemos en cuenta los beneficios que se derivan de practicar el ejercicio conjuntamente, no es de extrañar que hayan nacido programas como «Rescue runners» o «Rescue your fitness», en Nueva Orleans y Australia respectivamente, con los que protectoras de animales asignan un compañero canino a cada corredor. Sólo nos preguntamos cómo no surgieron antes.

Esta modalidad de deporte, que se va consolidando poco a poco, recibe el nombre de «canicross» y, para practicarla, es preferible contar con un arnés canino unido a un cinturón acolchado que se pone el dueño, ya que existe el riesgo de que el perro se haga daño si utiliza la correa convencional.

En lo relativo a la salud del animal, es necesario tener también en cuenta las recomendaciones de los expertos, que no aconsejan que éste corra antes de haber alcanzado la madurez musculoesquelética, a la que los perros pequeños llegan a los seis meses y los medianos y grandes en torno a los diez o doce. Además, la fisonomía de determinadas razas hace que estén más preparadas para el esfuerzo físico que otras. Así, mientras los perros medianos o grandes de pelo corto y hocico alargado –como los de caza o pastoreo– soportan bien las carreras y el ejercicio, los pequeños de cara achatada –como los bulldogs o carlinos– presentan generalmente problemas respiratorios.

En España la mecha del canicross prende rápido, y las iniciativas que lo promueven se van sumando. Así, la Can-rrera reunió a casi mil participantes, unos más peludos que otros, el pasado domingo en Valencia, y el próximo 16 de octubre Madrid será testigo de la quinta edición del Perrotón, una carrera solidaria de 4 kilómetros que partirá de la plaza de Colón por la adopción y tenencia responsable de animales de compañía y en la que se estima que se concentrarán unos 4.000 deportistas, cuyos perros podrán beneficiarse además de servicios veterinarios gratuitos.

Los participantes saben, sin embargo, que la verdadera recompensa se obtiene de la carrera en sí. Quienes practican el canicross cosechan los más que conocidos frutos del deporte, a los que suman el fuerte vínculo que alimenta el ejercicio compartido entre el perro y su dueño.

La carrera Perrotón nació, de la mano de Alejandra Botto, como una iniciativa destinada a concienciar a la sociedad española fomentando la adopción responsable de animales y, principalmente, en contra del abandono. Sin embargo, el éxito que ha cosechado cada año ha hecho de este encuentro el detonante de un fenómeno que permite ayudar anualmente a casi ochocientos canes gracias a la colaboración con la Universidad Alfonso X el Sabio y la red de clínicas veterinarias Veter Salud, con planes de esterilización y tratamiento de la Leishmaniasis.

Alejandra resalta el carácter simbólico del Perrotón: «No es competitivo, es una carrera donde la gente corre, anda y trota. Lo importante es que todos los que estamos ahí somos dog lovers». Además, como amante de los animales, subraya la necesidad de respetarlos y la relación que existe entre el maltrato animal y un maltrato posterior a las mujeres, los niños o los mayores.

Por todo ello, el canicross es más que una tendencia del momento: permite que el animal descargue una energía que, de lo contrario, podría traducirse en destrozos sobre el mobiliario: sillas mordisqueadas y cojines destripados. Y es precisamente esta energía del perro la que sirve para contrarrestar la pereza a la que, en la mayoría de las ocasiones, se enfrenta el dueño antes de decidirse a correr. Puede haber quien no encuentre la motivación suficiente entre los beneficios del running, pero al entusiasmo de quien se sabe compañero de camino es más complicado resistirse.

El perro no supone el socio perfecto de carreras sólo porque nunca vaya a dar una respuesta negativa a la proposición, sino porque, además, la fidelidad de su compañía hará que los trayectos menos seguros lo parezcan un poco más.