Discapacitados

Recuperar el derecho al voto a los 35

Más de 100.000 personas con discapacidad podrán participar por primera vez en estas elecciones. Como Antonio, demandan programas adaptados y colegios señalizados.

Antonio Hinojosa tiene discapacidad intelectual y acudirá el próximo 28 de abril a votar en su colegio se Leganés
Antonio Hinojosa tiene discapacidad intelectual y acudirá el próximo 28 de abril a votar en su colegio se Leganéslarazon

Más de 100.000 personas con discapacidad podrán participar por primera vez en estas elecciones. Como Antonio, demandan programas adaptados y colegios señalizados.

- l 15 de junio de 1977 es una fecha grabada a fuego en la memoria de los 18,5 millones de españoles que votaron por primera vez tras una larga dictadura franquista. Y el 18 de octubre de 2018 en la de las personas con dispacidad intelectual. Ese día el Congreso de los Diputados reconoció su derecho al sufragio. Han tenido que pasar 40 años para que la Democracia sea plena.

Estas Elecciones Generales también serán históricas: 100.000 ciudadanos que antes tenían vetado elegir a sus representantes por orden judicial, podrán, como cualquier otro elector, meter su papeleta en la urna. «Es un gran paso que hemos conseguido con mucho sacrificio y años de lucha, pero todavía queda camino». Antonio Hinojosa no tiene claro cuál será el ganador de los comicios porque «ya no es como antes, ahora hay muchos partidos», así que «habrá que esperar a ver qué coaliciones se forman». A sus 35 años, su criterio político y sus preferencias están muy definidas. Tiene discapacidad intelectual pero unas ideas muy claras. Sigue la actualidad y los sondeos –«El partido al que voy a votar es muy complicado que gane», reconoce– y ha trabajado activamente para conseguir que el próximo 28 de abril todos aquellos que antes estaban incapacitados judicialmente por tener alguna discapacidad intelectual, deterioro cognitivo o enfermedad mental no se queden en casa y ejerzan su derecho recién adquirido.

Antonio forma parte del equipo del movimiento Plena Inclusión, en el área de comunicación y accesibilidad cognitiva. «Me encargo de que las cosas sean entendibles, de que los documentos sean de lectura fácil», explica seguidamente, acostumbrado a que su interlocutor frunza el ceño cuando explica a qué se dedica. Y ahora que está a punto de arrancar la campaña electoral, aprovecha para hacer reivindicaciones a los partidos en ese sentido: «Algunos grupos parlamentarios todavía no tienen adaptados sus programas, resultan muy difíciles de comprender». Y también a la Junta Electoral: «Las indicaciones en los colegios no están claras, muchos se pierden y no pueden ir solos», insiste. Aunque él, quizá, sí lo haga: «Mi colegio está a 400 metros de mi casa, en Zarzaquemada (Leganés) y ya me lo conozco», apostilla orgulloso.

Pese al avance, el colectivo de personas con discapacidad intelectual sigue sintiéndose «humillado». El pasado 12 de marzo la Junta Electoral Central (JEC) emitió una instrucción para aplicar la reforma de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (Loreg), que ha ensombrecido las celebraciones. En ella se pedía a los interventores y apoderados de los partidos que cuando sospecharan que el voto de una persona con discapacidad «no es ejercido de forma consciente libre y voluntaria», lo deberían hacer constar en el acta de la sesión, identificando «al elector con su DNI». Tras las criticas del sector y de varios políticos, la JEC matizó la instrucción y eliminó los términos relacionados con la discapacidadad. En su lugar, indicó que se podría hacer constar la sospecha ante cualquier voto que se considere que no ha sido ejercido de forma libre.

«Es un retroceso democrático sin precedentes», critica Santiago López, el presidente de Plena Inclusión, que agrupa a 900 asociaciones de toda España. Alega que la instrucción de la JEC es «un completo disparate» y que puede provocar que algunos nuevos electores no vayan a votar por miedo a sentirse señalados y estigmatizados. Por ello, llevarán su denuncia al Defensor del Pueblo. «¡Claro que tiene consecuencias! Obviamente el voto va a ir a la urna, pero a muchos les puede reprimir y eso en las circunscripciones más pequeñas se nota. Que las personas con discapacidad intelectual no participen puede hacer cambiar el color de un Gobierno en algunos pueblos», advierte. Por eso les pide a los partidos que den a sus apoderados «las intrucciones contrarias a las que han recibido de la Junta Electoral Central». «Les pedimos que ni se les ocurra apuntar el DNI de alguien que tenga discapacidad intelectual o crean que pueda tenerla. Los partidos pueden hacerlo constar en las guías que reparten entre sus apoderados», insiste López.

También les reclama que incluyan en sus listas a candidatos de este colectivo y a sus familiares porque «todavía falta que se nos escuche».

En Plena Inclusión llevan tiempo preparándose para el 28 de abril. Tras diez años de lucha han logrado que se les tenga en cuenta. «Nos han tumbado muchas sentencias para recuperar el derecho al voto, pero el 18 de octubre del año pasado el arco parlamentario lo aprobó por unanimidad, todavía guardo esa foto». En estas elecciones, Santiago reconoce estar más nervioso que nunca porque su hijo, que se llama como él y tiene discapacidad intelectual, votará por primera vez. «Está contentísimo y, como una buena parte de los ciudadanos, también indeciso». Su familia es consciente de la importancia de que el pequeño Santiago tenga conciencia política y ejerza su derecho al voto para luchar por sus derechos. «Nosotros en casa hablamos de política e, incluso, él ha tratado con algunos líderes», explica. «¿Si eso le puede influir? Pues supongo que como a cualquier otro adolescente que hable con su familia de estos temas».

Desde Plena Inclusión reconocen que existe la posibilidad de que se produzca algún voto dirgido, «pero eso ha pasado siempre y no solo ahora». «Por ejemplo con las personas mayores. Lo sé porque mi madre cuando llegan elecciones siempre me pregunta a quién hay que votar», comenta.

Para que tanto su hijo como el resto de personas con algún deterioro cognitivo puedan formarse su propia opinión y elegir quién le representa, Plena Inclusión ha organizado talleres y reuniones con algfunos políticos: «Han venido a presentarles sus propuestas y tengo que decir que también se les ha hecho preguntas incómodas». También organizaron un simulacro de práctica electoral y ayer mismo se celebró una jornada de mítines y pegada de carteles para ir calentando motores y animar a los 100.000 electores con dispacidad que están llamados por primera vez a las urnas. «Queremos que las elecciones sean fáciles de entender, con programas adaptados, ir a los colegios electorales sin perdernos y que se respeten nuetras decisiones», se leyó en el manifiesto final, que concluyó animando a todos los ciudadanos a denunciar cualquier discriminación durante la jornada electoral.