Las desaparecidas de Cuenca, «retenidas contra su voluntad»

Sin pistas de dos jóvenes y el ex novio de una de ellas desde el jueves. La familia sospecha del ex novio de una de las jóvenes al hallar en el coche el móvil, el bolso, las llaves y la medicación que necesitaba a diario

Familiares y allegados pidieron ayer colaboración ciudadana después de que Marina Okarynska y Laura del Hoyo, de 24 y 26 años respectivamente, permanezcan desaparecidas desde el pasado jueves sin dejar rastro alguno. La última vez fueron vistas sobre las 17:00 horas del jueves. Desde entonces, nadie conce su paradero. Ni el de ellas ni el del ex novio de Marina, SergioMorate.

Marina acudió con su amiga Laura a recoger sus pertenencias a casa de Sergio y, a partir de entonces, nadie ha tenido más pistas de las dos jóvenes. El vehículo de Laura fue encontrado en la calle Fausto Culebras de Cuenca aparcado en las proximidades de la vivienda de Sergio. Allí estaban las pertenencias de Laura. «Cuando encontramos el vehículo y dentro estaba el móvil, dinero, las llaves de casa, la documentación y hasta la medicación que necesita –Laura sufre una especie de taquicardia y precisa esa medicación a diario– pensamos que era una desaparición contra su voluntad. Es de lógica», explicó ayer en rueda de prensa el portavoz de la familia, Luis Javier Chamón.

A ello hay que añadir que la chica también tiene un perro, «al que tenía un gran cariño porque le hizo mucha compañía cuando estuvo en Valencia», añadió. La familia asegura que no suele dejar a su perro tanto tiempo solo sabiendo que tiene que sacarlo o darle de comer. Éstos fueron los indicios que llevaron a la familia a ponerse en contacto con la Policía y lo que les ha hecho pensar que las dos jóvenes «hayan sido retenidas contra su voluntad».

La Policía pensó en un principio que podía tratarse de una fuga voluntaria de las jóvenes al ser mayores de edad pero, pasados los días, su desaparición ha empezado a ser inquietante ya que desde el jueves pasado ninguna de las dos chicas registra actividad en sus perfiles en las redes sociales, a pesar de ser muy activas.

Marina estaba «decidida» a comenzar una nueva etapa en la que se reconocía «super feliz», tal y como dejó reflejado en su perfil de Facebook el pasado 6 de agosto en el que podía leerse: «Voy a prepararme para ser una profesional de peluquería», por lo que la hipótesis de posible fuga pierde fuerza.

El portavoz de la familia, Luis Javier Chamón, informó ayer de que «se están rastreando muchas zonas», aunque no especificó cuáles. «No tenemos indicios o pistas, nos guiamos por sentimientos e impulsos (...) Hay un vacío de tiempo desde que desaparecen muy grande».

Chamón pidió ayer precaución con los datos que se difunden después de que en un momento de la tarde se filtrara que las jóvenes habían sido encontradas sin que fuera cierto. «Damos muchos palos de ciego, porque no sabemos realmente lo que buscamos», añadió.

El portavoz de la familia de Laura también ha confirmado que la última persona con la que habló la joven antes de desaparecer fue con Marina y que su última conversación apuntaba a que Laura recogería a su amiga para ir a la vivienda de Sergio y de allí su intención era la de ir a tomar algo las dos.

La madre de Laura, María Pilar Chamón, está convencida de que su hija la hubiera avisado si hubiera decidido no volver a casa: «Mis hijas no se iban a un sitio sin decírmelo (...) A Marina la conocía mucho, venía a casa algunas veces. También se iban a Valencia con ellas, a la playa. Es una chica trabajadora y muy maja». La mujer no pudo ocultar su angustia sobre la situación que está viviendo la familia: «Son muchas horas, esto es inaguantable, esto es un dolor impresionante. Me da igual ya cómo me la den, pero es mía y la quiero».

Numerosas personas se solidarizaron ayer con la familia y trataron de colaborar para dar con alguna pista que permita indicar dónde se encuentran las chicas desparecidas. Pedro José García Hidalgo, el concejal de Administración y Servicios a la Ciudad y tercer teniente del Ayuntamienyto de Cuenca, desde su perfil de twitter retuiteó una foto en la que se explica el día de la desaparción, jueves 5 de agosto a las 17:00 horas, y en Facebook ha mostrado una imagen para ayudar a su difusión.

También, la hermana de una de las desaparecidas lo ha mostrado en su perfil de Facebook, así como han hecho algunas de las personas de su entorno, que incluso han utilizado dicha instantánea como imagen de perfil de su usuario en Facebook. En las últimas horas, y dado el curso que han tomado los hechos, muchos son los amigos de las chicas, así como desconocidos, que se han sumado compartiendo información e imágenes de ellas para que todos sean conscientes de su desaparición y puedan ayudar para encontrarlas.

Además, por las calles de Cuenca están puestos los carteles con las imágenes de las desaparecidas en los que se pide la colaboración ciudadana.

Nada se sabe, sin embargo, de la familia del joven desaparecido. Sergio es originario de un pueblo muy próximo a la capital, Palomera, donde su familia es muy conocida, ya que apenas son 183 habitantes.

Todos se conocen, pero son discretos. LA RAZÓN ha podido hablar con algunos de los vecinos, pero la mayoría declinó hacer declaraciones.

«Son muy buena gente y seguro que, al igual que la familia de las dos chicas, lo están pasando fatal porque no saben dónde está Sergio». Ni a él ni a su hermano se les ha visto por la localidad «desde hace bastante tiempo». Y los padres de ambos también viven en Cuenca, por lo que pasan temporadas muy cortas en Palomera.

El ex novio de Marina, ¿en Portugal?

La familia de las jóvenes sospecha de Sergio Morate Garces, también desaparecido, aunque ayer, fuentes cercanas a la investigación manifestaron que el joven podría encontrarse en Portugal. Sergio, del pueblo cercano de Palomera, mantuvo una relación con Marina Okarynska y se «puso tenso» cuando se enteró de que Marina quería recoger sus cosas de la casa en la que vivían, por lo que la joven avisó a Laura para que la acompañara, según afirman desde su entorno. Sergio tiene antecedentes por un delito contra la libertad sexual y por el que había estado en prisión. La familia de Laura no le conoce. En la jornada de ayer se sostuvo el rumor, sin confirmar, de la posible muerte del joven.