Talavante: «Ya no creo en los intereses colectivos entre toreros»

El diestro extremeño Alejandro Talavante ha declarado que aunque sigue creyendo en los motivos por lo que tomó la decisión de no torear en Sevilla junto al denominado G-5, ya no cree «en los intereses colectivos entre toreros».

«Nada ha variado desde que nos negamos a torear en Sevilla, mientras esté al frente la empresa Pagés o no cambie su actitud frente a los toreros, pero a estas alturas -matizó- ya sólo creo en defender mi postura individualmente, porque a largo plazo no hay intereses colectivos entre los matadores», explicó a la agencia Efe. «Entre los cinco toreros existía un compromiso moral, más allá de papeles que, por mi parte, todavía están vigentes; pero ahora, que cada uno haga lo que quiera”, matizó. ¿Volver a Sevilla en 2015? «Me gustaría estar el año que viene pero no de cualquier manera; no voy a ser yo quien dé el primer paso», afirmó. «La postura que tomé en su día me lo impide, por lo que son ellos los que tienen que cambiar su actitud», insistió.

El torero de Badajoz no se consideró traicionado por sus compañeros, pero sí «dolido, porque, salvo Miguel Ángel Perera, ninguno se ha interesado por mi difícil situación de este año». «No es que buscara su apoyo, pero sí esperaba que fueran conscientes de que mi caso era el peor», añadió.

Tras concluir una temporada que él define como «una guerra de despachos», el diestro indicó que el hecho de que «se me estaba negando, incluso en la prensa, todo lo que me había ganado en la plaza me hacía sentir cierto vértigo, pero no frente al toro, donde lo único que me ha preocupado es estar a la altura de mi postura». No obstante, Talavante afirmó que este año ha tenido «muchas más satisfacciones en el sentido artístico, que es el único que debe contar en el toreo».

Ahora llega México. Tras firmar una exclusiva de 25 corridas en el país azteca con la EMTSA, Talavante dijo que su meta como torero es «tener un sentimiento de satisfacción perdurable, haya o no haya triunfo». «Por eso -continuó- quiero volver a dar la cara en todas las ferias de máxima responsabilidad, pero a mi aire y buscando compañeros que me ilusionen para competir». Me queda aún mucho camino, porque no he dejado en la memoria de los aficionados lo suficiente como para que se acuerden de mí cuando me retire”, asume el torero. Convencido de que «para ser torero hay que actuar al revés de lo que marca la inercia social», el extremeño explicó que «cuando más a contracorriente vas y más te apegas a las raíces de este espectáculo, aprendes a ser feliz y a disfrutar la profesión con conocimiento de causa».