Canción triste por Steven Bochco

El creador de series tan fundamentales como «Canción triste de Hill Stret», «La ley de Los Ángeles» o «Policías de Nueva York» murió el pasado domingo a los 74 años.

Hasta «Canción triste de Hill Street» las series eran mero entretenimiento formadas por buenos y malos, por historias episódicas que siempre acababan bien, con protagonistas de apenas aristas. Steven Bochco, fallecido el pasado domingo a los 74 años tras no superar un cáncer, lo cambió todo, el modo de escribir guiones televisivos y el modo de contarlos. Una generación al completo creció con los acordes de piano de aquella canción triste que nos acompañó durante 146 capítulos entre 1981 y 1987, toda una vida cuando eres jóven. Y sobre esas premisas creó un mundo del que partieron éxitos posteriores del calibre de «Perdidos», «The wire» o «Los Soprano», que nunca hubieran sido lo mismo sin Bochco. «Steven luchó contra la enfermedad con fuerza, coraje, gracia y su insuperable sentido del humor, murió en paz mientras dormía junto a nosotros», ha trasmitido su familia en un comunicado.

El productor y guionista puede considerarse uno de los pioneros «showrunner» de la televisión moderna, y su trayectoria reconocida en 1999 por el Sindicato de Productores de América, que le concedió el premio David Susskind por la calidad de sus programas, que establecieron todos los estándares que los productores usan en la actualidad

Series míticas

Dentro de su prolífica carrera destacan, además de la citada «Canción triste de Hill Street», que ganó ocho premios Emmy durante su temporada piloto, «La ley de los Ángeles», ficción que creó para la cadena NBC a finales de los 80 y con la que obtuvo cinco Globos de Oro y quince Emmy, galardón a la que estuvo nominada 89 veces. Tras dar el salto a la ABC, apostó por nuevas ideas, como «Policías de Nueva York», que obtuvo un gran éxito durante sus doce temporadas, «Doogie Howser» y «Murder One». Así, Bochco llegó a la cúspide del reconocimiento profesional entre los productores con dramas policiales y legales.

El neoyorquino siempre tuvo claras sus ideas. Desde el inicio de «Canción Triste de Hill Street» impuso a la productora que no se entrometiera en la dirección creativa de la serie mientras él estuviera trabajando en el piloto, abriendo el camino de la independencia creativa a los que llegaron tras él a la ficción. Algunos de sus amigos y conocidos dirigieron episodios de sus series, como Steven Spielberg, que comandó uno de «Colombo» escrito por él. El propio Spielberg recordaba en las redes sociales su visión, estilo, buen gusto y tenacidad: «Siempre nos hemos apoyado e inspirado y hemos estado en contacto durante 47 años a través de muchas amistades que teníamos en común. Voy a extrañar a Steve tremendamente».

En los últimos años seguía en activo, aunque no obtuvo grandes éxitos, o no tan importantes como los consechados hasta los años 90. Sus últimos trabajos fueron con «Señorita Presidenta», del canal ABC, protagonizada por Geena Davis, «Ganando el juicio», de TNT, y el drama criminal «Murder in the first», con Taye Diggs y Katheen Robertson.

A su carrera televisiva sumó también la de escritor tras publicar «Muerte en Hollywood», una novela satírica sobre las dificultades de un guionista en la meca del cine. En 2016, y a raíz de su enfermedad, publicó su autobiografía.

Seguro que Bochco, entre los más grandes de la historia de la pequeña pantalla, sigue tarareando su canción triste preferida mientras el sargento Esterhaus, frente al grupo de policías que apadrina cada día, suelta impertérrito aquella frase que pasó a la posteridad: «Tengan cuidado ahí fuera».