Hay que ganar la batalla al nacionalismo.

En la Diada los separatistas nos privaron al resto de españoles del derecho decidir sobre cuestiones esenciales que nos corresponden. Por ejemplo, el modelo de Estado o de convivencia. Los principales partidos políticos han callado; prefieren confundirse con el paisaje. Como el gobierno de España. En vez de decir que no va a permitir que se vulnere la Ley y la Constitución. Nos jugamos el bienestar de miles de españoles. El nacionalismo es una idea profundamente reaccionaria, que debe ser combatida con argumentos políticos y jurídicos.

Hay que ganar la batalla al nacionalismo. Es mejor vivir juntos que vivir separados. Hace falta más contundencia, menos miedo o los nacionalistas, insaciables, terminarán ganando la batalla.

Igual que nos oponemos al convenio económico vasco nos opondremos claramente a cualquier tipo de pacto fiscal.