Elecciones Generales 2016

Unidos Podemos importa el corazón de Maduro al 26-J

El logotipo elegido por Iglesias para las elecciones evoca el utilizado por el sucesor de Chavez en las presidenciales de 2013

El corazón de Unidos Podemos recuerda al que llevó al poder a Maduro en 2013. En aquel entonces la Fundación CEPS, embrión político de Podemos, era el principal asesor de imagen del régimen chavista.
El corazón de Unidos Podemos recuerda al que llevó al poder a Maduro en 2013. En aquel entonces la Fundación CEPS, embrión político de Podemos, era el principal asesor de imagen del régimen chavista.larazon

Podemos e Izquierda Unida prensentaron ayer –por separado– el logotipo y el lema que utilizará la cualición formada por ambos partidos durante la campaña electoral. La imagen que proyectará Unidos Podemos estará presidida por el simbolo del corazón, que ha sustituído a la primera «o» de la marca con la que concurrirán Iglesias y Garzón el 26-J. Aunque existen evidentes diferencias de diseño, tanto el símbolo del corazón como el tono optimista, positivo e ilusionado del material de campaña evocan el utilizado por Nicolás Maduro durante las presidenciales venezolanas de 2013. Aquellos comicios fueron los primeros tras la muerte de Hugo Chavez y Maduro, designado por el fallecido presidente como su sucesor antes de morir, fue el candidato del Gran Polo Patriotico. Con el corazón en el logotipo, el actual presidente venezolano ganó las elecciones a Henrique Capriles (candidato de la Mesa de la Unidad Democrática) y permanecerá en el puesto hasta 2019.

Dificilmente pueden sorprender los paralelismos entre ambas campañas cuando se recuerda que en 2013 la fundación CEPS –embrión político de Podemos en el que, en un momento o en otro, trabajaron Iglesias, Errejón, Bescansa, Monedero, Abril y otros líderes del partido– era el principal asesor de comunicación política del régimen chavista. Así se puso de manifiesto en los documentos aportados por el diputado opositor venezolano Julio Montoya en su visita al Congreso de los Diputados en abril de 2015, documentos que fueron objeto entonces de varias informaciones de este diario.

Tanto el lema como el logotipo fueron anunciados ayer en un acto celebrado en el Jardín Botánico de la Ciudad Universitaria de Madrid al que asistieron, además de Pablo Iglesias, el director de campaña de Podemos, Íñigo Errejón, la jefa de gabinete de Iglesias, Irene Montero, y la responsable de análisis del partido, Carolina Bescansa. Alberto Garzón no estuvo presente en el evento pero sí que compartirá escenario con el líder de Podemos en cuatro mítines a lo largo de la campaña, además de la pegada de carteles la noche del día nueve de junio y el cierre de campaña el día 24 en Madrid.

Las ciudades donde aparecerán juntos ante sus simpatizantes serán Barcelona, el día 11; Alicante, el viernes 17; y Jerez (Cádiz), el jueves 23, según han confirmado hoy también fuentes de la coalición de izquierdas, informa Efe.

Al margen de esos actos, harán campañas diferenciadas y tendrán diferentes caravanas, pero no excluyentes, en palabras de Errejón, que dejó claro que la presentación de hoy era la forma en la que Podemos contribuye a la campaña de una alianza de partidos y organizaciones que se han puesto de acuerdo para unir fuerzas y lograr el cambio.

El director de campaña de Podemos hizo ayer referencia a una de las preocupaciones que hasta el momento existía en las filas moradas: la utilización de banderas comunistas y republicanas en los mítines de la coalición, una simbología que, hasta el momento, Podemos ha pretendido evitar a toda cosa. Errejón no teme que sus actos se llenen de símbolos comunistas. Mas bien, al contrario, está convencido de que a los actos de Unidos Podemos la gente llevará muchísimos símbolos, pero sobre todo de que «la inmensa mayoría no llevará ninguno», sólo «sus manos, sus ganas y su ilusión», informa Efe.

Por su parte, Iglesias resaltó también el valor de la alianza con IU y otras fuerzas políticas, que han conseguido juntos convertirse en la alternativa real al PP. Asumen así, dijo, el reto de intentar ganar las elecciones y «tender la mano a la vieja socialdemocracia», es decir, al PSOE, que a su juicio será quien tenga que «arbitrar» y decidir en este momento de «impasse político» si el Gobierno sigue en manos del PP o hay un ejecutivo de cambio.

Con el lema «La sonrisa de un país» y el corazón como símbolo multicolor, Podemos quiere definir el estado de ánimo con el que intentará contrarrestar los ataques de los demás partidos. Será, según Errejón, una campaña amplia, coral, «de país, en la que participarán todos los referentes del cambio político que permiten imaginar una mayoría nueva» para recuperar la democracia y las instituciones. Por eso, a lo largo de los quince días de carrera electoral varios actos contarán también con la participación de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; la vicepresidenta valenciana, Mónica Oltra; el coportavoz de Anova, José Manuel Beiras; y el histórico ex dirigente de IU Julio Anguita. La ruta de Podemos pondrá mucho énfasis en el Mediterráneo y en Andalucía, donde cree que se puede dirimir buena parte de la posibilidad del cambio político.