Turquía

Nuevo éxodo de Alepo a Turquía

Refugiados sirios en la frontera de Bab al-Salam en Turquía
Refugiados sirios en la frontera de Bab al-Salam en Turquíalarazon

Decenas de miles de sirios huyeron ayer de un intensificado asalto ruso sobre Alepo. Trabajadores humanitarios indicaron que la mayor ciudad de Siria puede caer próximamente bajo el asedio del Gobierno. Por su parte, Irán informó ayer de que uno de sus generales había caído en el campo de batalla, dando una confirmación directa del papel que está jugando Teherán junto a Moscú en lo que parece la ofensiva más determinada de los cinco años de guerra civil.

La operación militar del Gobierno alrededor de Alepo y sus avances en el sur y noroeste ayudaron a torpedear las negociaciones de paz de Ginebra esta semana. La intervención de Rusia ha inclinado la balanza y ahora es el presidente Bachar al Asad quien está reconquistando el territorio ganado por los rebeldes. En los dos últimos días, los soldados progubernamentales y sus aliados libaneses e iraníes han logrado rodear por completo la ciudad, al norte de Siria, de Alepo y han cortado la ruta principal de suministro que une la ciudad más poblada de Siria antes de la guerra con Turquía. Ankara informó ayer de que sospecha que el objetivo de esto es matar a la gente de hambre para lograr su sumisión.

Alepo podría ser el mejor premio estratégico del Gobierno de Asad en los últimos años en un conflicto en el que ya han muerto 250.000 personas y que ha provocado que once millones de personas hayan abandonado sus hogares. Ayer, miles de personas llegaron al cruce de Bab al Salam y se amontonaron en la frontera turca. Hombres con malestas en sus cabezas, y ancianos y personas con discapacidad en sillas de ruedas. Las mujeres se sentaron a un lado de la carretera sujetando a sus bebés a la espera de que se les permita el paso a Turquía. La ONU estimó ayer que sólo en ese paso habría unas 20.000 personas.

El primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, aseveró que 15.000 personas que habían huido de Alepo habían llegado ya a la frontera y se esperaban decenas de miles. El grupo de Derechos Humanos Amnistía Internacional urgió al país a que permita la entrada a los que huyen de la violencia. «Parece que el asedio a Alepo está a punto de empezar», explicó David Evans, director de la agencia de ayuda humanitaria estadounidense Mercy Corps, quien añadió que la ruta humanitaria directa hasta Alepo había sido dañada. «La situación en Alepo es una catástrofe humanitaria», manifestó un portavoz de la oposición aún en Ginebra. «La comunidad internacional debe tomar medidas urgentes y concretas para abordarla».

También ayer, Bahréin se mostró dispuesto a desplegar tropas terrestres en Siria para fortalecer la lucha contra el Estado Islámico, sumándose así a la iniciativa saudí. El embajador de Bahréin en Londres, Seij Fawaz bin Mohamed al Jalifa, afirmó que su Gobierno podría enviar efectivos de combate a Siria «en coordinación con los saudíes» en lo que ha definido como un mando militar unificado de las naciones árabes del Golfo. Reuters