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La espantada de Ángel Schlesser

Después de 27 años sin faltar a sus 54 desfiles, dos por año, el diseñador fue el gran ausente en la apertura de la 64 edición de la MBFWMadrid.

Andrés Sardá llenó una vez más de sensualidad y picardía la pasarela madrileña
Andrés Sardá llenó una vez más de sensualidad y picardía la pasarela madrileñalarazon

Después de 27 años sin faltar a sus 54 desfiles, dos por año, el diseñador fue el gran ausente en la apertura de la 64 edición de la MBFWMadrid.

Estaba en su casa comiendo. Circulaba el rumor de que un inoportuno dolor de lumbago le impedía acudir a la puesta en escena de su colección. Después, se informó de que había un comunicado, vía e-mail, con las causas de la no presencia del diseñador y, por último, la presencia en el camerino de un nuevo equipo creativo de diseño confirmaba que, efectivamente, después de 27 años desfilando dos veces al año ininterrumpidamente en la pasarela madrileña, el modisto cántabro no estaría presente para saludar al final de su carrusel. Ángel Schlesser, hasta ayer, llevaba desde 1989 desfilando en la pasarela Cibeles, ahora llamada MBFWMadrid. Excepto los años que formó parte del grupo de diseñadores disidentes que contraprogramaban su propia pasarela de moda por desavenencias con el «establishment» cibelino, no había faltado nunca a su saludo al finalizar el show. El motivo de su ausencia ha sido la venta en el mes de enero de su firma al sobrino de Ramón Areces, Óscar Areces, que sigue siendo accionista de El Corte Inglés. El primo de Isidoro Álvarez, a través de la Corporación PRINOA, se hacía a primeros de año con el 75 por ciento de la firma Ángel Schlesser. El diseñador conserva un 25 por ciento y un compromiso de vinculación con la marca por cinco años por prestación de servicios. Eso hace que siga acudiendo diariamente a su taller a trabajar pero que no se haya implicado en la colección: «Vendí parte de mi firma porque en un principio había un proyecto muy interesante de expansión que con el tiempo he visto que no era así. No he querido involucrarme en esta colección porque no siento que sea mía. Es cierto que, en un inicio, yo elegí algunas telas, pero tal y como fueron sucediendo las cosas, decidí no involucrarme porque el resultado no soy yo. Esta colección lleva mi nombre pero la ha diseñado un equipo creativo».

Ahora ese equipo de diseño lo forman Carolina Menéndez, fichada por Trucco, y Alexandre García, un joven que ha sido asistente de Schlesser durante estos dos últimos años. Ellos, sin embargo, sí creen que tiene el sello del cántabro: «Hemos querido continuar en la misma línea sobria de Ángel pero aportando frescura. Seguiremos haciendo la camisa blanca y el pantalón recto marca de la casa». Lo cierto es que la colección tiene algún retazo del diseñador en los pantalones rectos y holgados, en los guardapolvos sin forrar como si fueran abrigos o en los colores naturales, pero las cazadoras XXL, los tops palabra de honor y los algodones cracantes eran inéditos en los bocetos Schlesser. La nueva etapa no es ni mejor ni peor, pero sí distinta por lo presentado ayer en la pasarela. Sobre el futuro Ángel tiene varias ideas: «Mañana mismo podría abrir otra empresa porque no hay nada que no me deje. No he firmado ninguna cláusula que me impida crear ‘‘A.S.’’, por ejemplo. Siempre me ha rondado la idea de la decoración y podría ser algo a desarrollar pero no existe un proyecto de futuro concreto porque aún no he cerrado mi etapa actual. Desde luego, lo que necesito es tiempo para reflexionar. Cuando me tome ese tiempo decidiré».

El nuevo propietario mayoritario de la firma, Óscar Areces, es un hombre con una gran experiencia en el mundo del textil y especialmente en su última etapa en el departamento de compras de mujer de unos grandes almacenes. Ha desarrollado toda su vida profesional en El Corte Inglés, fundamentalmente porque es uno de los propietarios de los grandes almacenes, a través de la empresa familiar de la que sigue siendo accionista. A principios de año, Areces decidía dar un paso en solitario y adquirir una marca de moda consolidada, que quizá sea el embrión de algo más. Se fijó en Schlesser «porque tiene un gran potencial de crecimiento y llegamos a un acuerdo con Ángel para adquirir parte de la marca». No quiere dar cifras, pero Ángel Schlesser no tiene inconveniente en aclarar los porcentajes: «75 por ciento, Areces y 25 por ciento, Schlesser».

El nuevo propietario aclara los motivos de esta compra: «Se trata de una inversión particular mía, quería aprovechar toda la experiencia que he tenido en El Corte Inglés y llevarla a Ángel Schlesser. El hoy es centrarme en ésta, aún no puedo decir cómo será el futuro. Es la colección más Ángel Schlesser de todas, se ha trabajado muchísimo. Él nos ha dado unos motivos personales para no estar hoy en el desfile y la gran noticia no es que no haya venido, sino que sale otra colección y es el inicio de una nueva aventura que nos va a ir mejor y la vamos hacer más grande». Lo cierto es que ha sido una colección brillante, muy trabajada, elegante, femenina y bastante comercial, donde no ha faltado el estilo pijama y batín para salir a la calle, que será la prenda estrella de nuestro próximo armario.