De Casa Fabiola a casa Bellver

El tesoro artístico que el coleccionista dona a Sevilla ya tiene sede definitiva para que sea expuesto a lo largo de 2017.

El cerca de un millar de piezas de la colección Bellver al fin estarán a disposición de los sevillanos a lo largo de 2017. Después de años de espera sin que se fijase el espacio idóneo de la exposición de un legado gratuito, la Casa Fabiola será la sede elegida. Además, el coleccionista nacido en Bilbao, pero sevillano de adopción (donde reside desde 1940), anunció ayer nuevas donaciones de obras de arte, porque «Sevilla es mi heredera», apostilló.

El alcalde hispalense, Juan Espadas, y Mariano Bellver visitaron ayer la Casa Fabiola, un inmueble que estaba siendo utilizado desde hace 4 años por los servicios administrativos de la Delegación de Hacienda, que serán reubicados a principios del próximo año con este fin. El empresario y propietario del colegio San Juan Bosco había llegado a un acuerdo con el anterior alcalde, Juan Ignacio Zoido, para ubicar la exposición en el Pabellón Real pero se advirtieron dificultades para convertirlo en una casa museo ( y un gasto de 3 millones de euros). El nuevo Gobierno local sugirió esta opción y Bellver y su esposa –que habían supeditado el acuerdo de donación al Pabellón Real,– dieron el «ok» para el cambio. La ubicación es buena. «Supone poner el museo en el circuito turístico de la ciudad, junto al Alcázar y la Catedral», señaló Espadas.

El Pleno de octubre, la semana que viene, ha de autorizar la compra del inmueble por 4,5 millones de euros y la operación de crédito para su financiación. No será el único trámite, pues también se firmará un convenio con el Patronato del Alcázar para vincular las entradas a la financiación. La burocracia, precisamente, estuvo a punto de hacer desistir a Bellver, que lleva desde 2000 tratando de que su colección se visitable por los sevillanos. «Hemos pasado por muchas etapas, unas buenas y otras malas, pero voy a pasar página y ceder este patrimonio que durante muchos años he acumulado y que tengo la posibilidad de devolver a Sevilla», señaló.

El tesoro de Bellver está compuesto por 943 obras de arte que están valoradas en 14 millones de euros. Entre ellas destacan los cuadros de pintura costumbrista de la escuela sevillana del siglo XIX, cerca de 300; una treintena de José García Ramos, varios lienzos de Sánchez Perrier, dos grandes cuadros de Gonzalo Bilbao, acuarelas de Villegas Cordero, un paisaje veneciano de José Jiménez Aranda...

Pero también esculturas (más de 150, entre las que se halla una copa del ángel caído del Retiro de Madrid), cerámicas y muebles.

Y «esto no termina aquí», añadió ayer. El resto de sus obras, que permanecerán en su casa mientras él viva, pasarán posteriormente a la ciudad. Habrá una segunda y una tercera donación «dependiendo de que el alcalde haga bien las cosas». «Será el museo del costumbrismo andaluz, donde la gente normal que se acerque entenderá lo que ve», explica Bellver. De momento, el siguiente objetivo es que el 5 de diciembre, cuando cumple 90 años, el acuerdo de traspaso de la Casa Fabiola sea una realidad y permita hablar de verdad de una casa Bellver en 2017.