La Guardia Civil tendrá 18 nuevos pisos en la Marina

El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, y el delegado especial del Estado en el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (Czfb), Jordi Cornet, firmaron ayer un convenio que posibilita que 18 familias de la Guardia Civil se alojen en otros tantos pisos en el barrio de la Marina, en la Zona Franca. Esta iniciativa ha sido acordada como consecuencia de las obras de urbanización en esta zona, donde el cuartel del Instituto Armado será demolido.

Las viviendas están situadas delante de la comisaría de los Mossos d’Esquadra y podrán ser habitadas a mediados del año que viene, explicó Fernández Díaz. Son pisos sociales que construye el Consorcio de la Zona Franca. El inmueble, que constará de seis plantas y seis escaleras ­–aún está en obras–, y una de estas últimas estará destinada exclusivamente a la Guardia Civil.

Fernández Díaz, Cornet, y la delegada del Gobierno en Cataluña, Llanos de Luna, visitaron las obras del edificio donde se ubicarán las viviendas, acompañados de numerosos cargos de la Guardia Civil y también de la Policía Nacional.

Colaboración institucional

El ministro destacó que este proyecto es un «ejemplo de colaboración institucional», y resaltó que los 18 nuevos pisos contribuirán a la «integración» de la Guardia Civil en Barcelona y Cataluña, hecho que, no obstante, recordó que ya no es necesario, teniendo en cuenta que el Instituto Armado lleva 172 años –desde su fundación, en 1844– en territorio catalán. Insistió en la importancia, tanto de la Guardia Civil como de la Policía Nacional, para garantizar la seguridad en Cataluña y, por extensión, en toda España.

Añadió el ministro de Interior que la construcción de estas viviendas reafirma el «sólido» compromiso del Gobierno con la seguridad pública en Cataluña. «La proximidad favorece la confianza, y es un ingrediente esencial para recibir el mejor servicio», destacó, antes de recordar que en estos momentos el mayor peligro es el terrorismo yihadista.

Por su parte, Cornet explicó que «la eficaz gestión de los recursos del Consorcio» permitió la inversión de ocho millones en la construcción y urbanización del primer edificio de viviendas del barrio de la Marina.

El inmueble está justo al lado del recinto 2 de la Fira de Barcelona, el Puerto y el polígono industrial de la Zona Franca. Se trata de una zona en transformación a nivel urbanístico.

Cornet destacó que «la Marina es un barrio en transformación, pero en estos años también se ha transformado el Consorcio. El saneamiento de las cuentas de la entidad ha posibilitado pasar de un Consorcio con deudas y pérdidas millonarias –doce millones en 2011– a una entidad totalmente saneada y con capacidad inversora. Hemos vuelto a los beneficios, 23 millones en 2014».

La Marina se extiende sobre una una extensión que es de unas 80 hectáreas, a los pies de la montaña de Montjuïc, en la límitación de la Gran Vía de L’Hospitalet y el recinto de Fira de Barcelona. Combina usos residenciales, actividad económica y servicios.