El PSOE-A ve a la Junta «superada» por la escalada de la pandemia

El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, José Fiscal, aseguró que el presidente de la Junta, Juanma Moreno, y su vicepresidente, Juan Marín, «hablan ya de plantear un confinamiento general y domiciliario en Andalucía porque están superados ante la escalada de la pandemia desde que asumieron el mando único en la gestión de la crisis del coronavirus, y por culpa de su falta de anticipación y de previsión». En una nota de prensa, Fiscal indicó que Moreno y su Gobierno de PP-A y Ciudadanos «están fallando en sus responsabilidades como única autoridad en la gestión de la pandemia, como evidencia que la comunidad está a la cola en PCR en toda España, es la última en número de rastreadores por habitante, con plantillas sanitarias que se declaran saturadas y maltratadas por la enorme presión en la Atención Primaria y en los hospitales sin contar con refuerzos suficientes».

Además, también incide en que las residencias de mayores vuelven a presentar «datos insostenibles» de contagios, pacientes y fallecimientos de ancianos. Mientras, según lamentó, «las derechas al frente de la Junta sí son líderes indiscutibles en propaganda y autobombo».

El portavoz socialista insistió en que la ciudadanía andaluza está asumiendo las medidas marcadas por el Gobierno andaluz y «cumpliendo su responsabilidad de respetar la distancia social, las restricciones de movilidad, los aforos máximos y las reuniones de seis personas como máximo», por lo que censuró que Moreno se muestra «incapaz» de «cumplir su parte y hacer su trabajo a tiempo y bien para frenar la pandemia con más PCR, más rastreadores y refuerzos sanitarios».

Para Fiscal, está claro que Moreno, Marín y todo el Ejecutivo de PP-A y Cs «prefieren que sea el Gobierno de España el que tome las riendas y, de nuevo, asuma todo el trabajo y la responsabilidad de adoptar las medidas necesarias para afrontar al virus y proteger la salud y la vida de las personas».

En relación a los Presupuestos andaluces, señaló que está en manos de Moreno «elegir entre el apoyo socialista o el chantaje de la ultraderecha de Vox».